Esta parece que es la moda que se ha impuesto últimamente en
la ciudad, aunque los agentes de la Policía Nacional, con su
experiencia, desmontan este tipo de acciones. No es la
primera vez que alguien acude hasta la Jefatura Superior de
Policía Nacional para denunciar haber sido de un robo,
atraco o cualquier tipo de delito que luego, tras la
correspondiente investigación, resulta ser una denuncia
falsa.
Y esto es lo que sucedió el pasado día tres, cuando un joven
denunció en esta Jefatura Superior de Policía haber sido
víctima de un robo por parte de dos individuos, quienes tras
golpearle le sustrajeron por la fuerza un bolso del tipo
riñonera en cuyo interior llevaba un teléfono móvil, de la
marca Sansung SIII, y treinta euros.
Los individuos, según la denuncia, una vez perpetrados los
hechos, se dirigieron corriendo en dirección al muelle
pesquero.
Posteriormente, el denunciante volvió a comparecer para dar
cuenta de que el citado móvil había aparecido en la guantera
de su coche.
De las investigaciones se hicieron cargo funcionarios del
Cuerpo Nacional de Policía, quienes llegaron a sospechar que
pudiera tratarse de una simulación de delito con fines
lucrativos por parte del denunciante, por lo que se le
preguntó de forma detallada sobre los hechos, con el único
obbjetivo ¡ de confirmar la existencia del teléfono que
manifestó le habían robado.
Tras ello, el denunciante reconoció que la denuncia
presentada no se ajustaba a la realidad y que lo que había
ocurrido era en realidad que pensó haberlo extraviado en un
taxi, por lo que el objeto de formular la consecuente
denuncia no era otro que justificar ante la compañía de
seguro la misma y que esta se lo pagara, pero cuando una
amiga le dijo que se le había caído en el taxi y que ella lo
había recogido, compareció nuevamente para dar cuenta de la
aparición del mismo.
Ante estas declaraciones, los policías actuantes procedieron
asu detención, siendo puesto en libertad con cargos. El
detenido lo había sido anteriormente en una ocasión.
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