Isabel Allende, directora de EAPN-España, visita hoy la
ciudad con el fin de conocer la realidad de Ceuta en el
ámbito de la pobreza y la exclusión social. Durante su
estancia en la ciudad, además de intersarse por esta
situación, Allende ofrecerá una rueda de prensa. Antes ha
hablado con EL PUEBLO sobre las propuestas que hace la
organización para acabar con la fractura social. Además
también ha valorado la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, de
la que dice que es una grave lesión para los derechos
humanos. Mientras, sobre la atención sanitaria a inmigrantes
asegura que es un paso que puedan volver a la Atención
Primaria pero señala que hay que seguir avanzando hasta que
tengan también una tarjeta sanitaria.
Pregunta.- Ceuta es una de las ciudades con más porcentaje
de personas en riesgo de exclusión social, ¿qué se puede
hacer para paliar esta situación?
Respuesta.- La situación de pobreza y exclusión social en
Ceuta puede disminuir con políticas sociales factibles y
fluidas que pasen directamente por solventar esa fractura
social existente a día de hoy. Por ello, la Plataforma del
Tercer Sector reivindica que desde el gobierno se impliquen
aun más en este tema ya que, si no disminuye la pobreza,
tanto las ciudades como el país en su conjunto no avanzarán.
P.- Es especialmente preocupante la situación de los
menores considerados pobres y que no tienen acceso a tres
comidas diarias, ¿cuál debe ser el papel de la
administración en estos casos? ¿Se está actuando
adecuadamente o hace falta más determinación?
R.-Lo fundamental es luchar contra la pobreza y la exclusión
social en general, porque no hay niños pobres en familias
ricas. Pero evidentemente, mientras se implementan las
políticas que hagan que las familias puedan salir de la
pobreza y dar de comer a sus hijos e hijas, tanto niños como
personas adultas deben comer, por lo que en el caso de los
menores, desde la administración local, conjuntamente con el
Ministerio de Educación, debe hacerse posible la apertura de
comedores escolares en todos los centros públicos para
garantizar que las y los niños afectados tengan sus
necesidades alimentarias cubiertas.
P.- La sociedad, ¿cómo puede ayudar a paliar las
situaciones de exclusión social?
R.- Todas las personas podemos ser parte de la solución. A
través del voluntariado en entidades sociales, cualquier
persona puede participar en proyectos que contribuyen a
mejorar la vida de millones de personas en situación de
pobreza y/o exclusión social. La mayor parte de
responsabilidad debe recaer en las administraciones
públicas, pero la ciudadanía también debe formar parte del
cambio social que conduzca a una sociedad más cohesionada, y
también debe pedir a los poderes públicos que implementen
políticas que no sólo luchen contra la pobreza y la
exclusión social, sino que la prevengan.
P.- Sanidad ha anunciado que los inmigrantes podrán
volver a acudir a la Atención Primaria, pero sin derecho a
una tarjeta sanitaria, ¿qué le parece la medida? ¿Es
suficiente?
R.- Esta medida va en la buena dirección, porque responde a
una de las demandas de las entidades sociales. Sin embargo,
en EAPN vamos allá, ya que apostamos decididamente por el
acceso universal al Sistema Nacional de Salud, tanto a la
atención primaria como a las especialidades y los servicios
de urgencias. La tarjeta sanitaria garantiza la igualdad en
el acceso a estos servicios, por tanto, el Gobierno debe
avanzar en fórmulas que permitan ejercer este derecho a toda
la población sin excepciones.
P.- La X Solidaria es clave para el funcionamiento de las
asociaciones del tercer sector, ¿la gente está
suficientemente informada al respecto? ¿Qué diría para
animar a los contribuyentes a marcarla?
R.- Gracias a la x solidaria, en 2015, las ONG pondrán en
marcha 1.236 programas destinados a mejorar las vidas de 6
millones de personas en nuestro país; además un 19% de lo
recaudado se destinará a Cooperación Internacional y un 1,4
% a Medio Ambiente. Son proyectos que crean cohesión social
y, lo más importante, no cuestan nada al contribuyente. Ni
tiene que pagar más ni le devuelven menos. El pasado
ejercicio, un 47% de la población que hizo la declaración de
la renta no marcó la casilla de fines sociales y dejó en
blanco la posibilidad de destinar sus impuestos a quienes
más necesitan de nuestra solidaridad.
P.- La nueva ley de Seguridad Ciudadana ha levantado las
críticas del tercer sector, de los partidos de la oposición
y de gran parte de la sociedad, ¿qué valoración le merece?
R.- La Plataforma del Tercer Sector, de la que forma parte
EAPN España, ha manifestado públicamente su oposición a esta
ley, que supone una grave lesión para los derechos humanos y
sociales y para la libertad de expresión. Oposición que es
compartida por una amplia mayoría de organizaciones sociales
y partidos políticos. La ciudadanía demanda leyes que puedan
poner freno a sus problemas y contribuyan a reducir la
pobreza y la exclusión social. En este sentido, seguiremos
trabajando para que, en ningún caso, esta ley derive en una
criminalización de las personas más vulnerables.
P.- ¿Cómo entiende que se debe gestionar la inmigración
en las ciudades autónomas?
R.- Toda actuación relativa a la gestión de la inmigración
se debe basar en el respeto a los derechos humanos. Todos
los países europeos, independientemente de sus fronteras,
tienen que ser conscientes de la necesidad de consensuar
políticas y apoyar en la gestión del flujo migratorio. Las
referencias de esas políticas debe ser el trabajo en los
países de origen para que migrar se convierta en una opción
y no una necesidad. Cabe destacar el buen trabajo que se
realiza en los CETI, sin embargo consideramos muy necesario
que se realicen los traslados a la península con la mayor
celeridad posible, puesto que si no se producen, se crean
problemas de sobreocupación. También es importante destacar
que en el puesto fronterizo se haya abierto una oficina para
solicitantes de asilo, toda vez que se garantiza su acceso a
este derecho.
P.- ¿Cómo está funcionando EAPN en la ciudad?
R.- La Red de Asociaciones contra la Pobreza y la Exclusión
social está actuando de forma directa con la realidad que
vive Ceuta. Son ocho las asociaciones que forman la red:
Cruz Roja, Fundación Cruz Blanca, Mujeres Progresistas,
Cáritas, Cardjin, Banco de Alimentos y Accem.
P.- ¿Cuáles son los retos que tiene por delante?
R.- Todas estas organizaciones tienen objetivos concretos,
pero siempre con la mismo objetivo: Acabar con la pobreza y
la exclusión social. Por ello, durante todo el año, tenemos
organizadas diversas actividades como Transmisiones de
valores en centros educativos, así como talleres y jornadas
de capacitación al voluntariado, que permiten un contacto
más cercano con las personas en riesgo de exclusión social
y/o pobreza.
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