El comercio ceutí responde a un modelo tradicional con
establecimientos cuya antigüedad media es de 15 años, en
régimen de alquiler, con un sistema de venta que apenas ha
variado a pesar de las nuevas tecnologías, cuyos empresarios
no están asociados, que no abren los sábados por la tarde y
que cuentan con una media de tres empleados, con formación
básica y algunos conocimientos de idiomas. Esta es parte de
la radiografía que ha hecho la Cámara de Comercio en su
estudio sobre el perfil del comercio minorista en Ceuta. Un
documento elaborado en colaboración con la Ciudad Autónoma y
el Ministerio de Economía, que sirve para conocer los puntos
débiles y fuertes de un sector llamado a crecer y a
convertirse en un pilar fuerte de la economía ceutí. Para
ello, será clave el avance en las nuevas tecnologías, algo
que los propios empresarios ya demandan y así se refleja en
el estudio de la Cámara.
La mayoría de los comerciantes reclaman formación en nuevas
tecnologías, idiomas y gestión comercial. Y es que,
actualmente apenas se han introducido nuevos modelos como la
venta por objetivos. El uso principal de las tecnologías
para la mayoría de los comercios minoristas, es la
realización de las ventas, el manejo de proveedores, la
facturación y las compras. Un 82,35% tienen acceso a
internet, y de ellas el 40,48% no utiliza ninguna Red
Social. Además, los empresarios reconocen que no suelen
acudir a la Administración Pública, ni a sus líneas de
ayuda.
Zona centro
Este perfil es muy similar al de los comercios de la zona
centro. En ellos, la antigüedad mayoritaria está entre los 4
y los 8 años. Se trata de puntos de venta únicos, es decir,
de empresas con una única tienda. Sus propietarios son
trabajadores autónomos, que no acuden a ferias habitualmente
y que no forman parte de ninguna asociación, aunque sí
desean recibir información de estas y demandan formación en
nuevas tecnologías.
Los negocios en esta zona, en su mayoría, son de nueva
creación, no tienen previstos cambios significativos en la
gestión empresarial, y sus clientes, de nivel económico
medio y medio alto, son tanto de la ciudad como de
Marruecos. Mientras su plantilla está compuesta de una media
de tres empleados.
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