La consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, y Dolores
Bruzón, representante la Asociación Programa de Ocio
Inclusivo (PROI), han suscrito un convenio de colaboración
al que la Ciudad aporta 40.000 euros para que la entidad
lleve a cabo programas para mejorar la calidad de vida de
personas con parálisis cerebral o grave discapacidad motriz.
Entre los objetivos de esta colaboración están el de
impulsar condiciones que faciliten la inclusión de jóvenes
con parálisis cerebral o grave discapacidad motriz; mejorar
su calidad de vida fomentando su comunicación, habilidades
sociales, autoestima, motivación, accesibilidad y
capacidades; promover políticas de inclusión y equiparación
de oportunidades; facilitar su acceso al ocio comunitario; y
fomentar la implicación de la comunidad con acciones
voluntarias que favorezcan la inclusión social. También se
encuentra entre los retos la promoción de programas y
actividades que apoyen, especialmente en la etapa juvenil,
la inclusión social en un entorno normalizado; el desarrollo
de las capacidades creativas con una terapia que toma como
herramienta el arte; y conseguir una plena inclusión en la
sociedad.
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