La inmigración se ha convertido en una realidad para Ceuta y
sus habitantes, que cada día trabajan para ayudar a aquellos
que cruzan la frontera en busca de un lugar mejor. Pero los
inmigrantes no sólo necesitan ayuda una vez que cruzan y así
lo entienden desde el círculo de Podemos Migraciones en
Ceuta, que desde hace más de un año están en contacto con
los campamentos de inmigrantes más cercanos a la ciudad para
suministrar alimentos y ropa a aquellos que se encuentran
sin nada más que un sueño que los mantiene en pie. Una tarea
que desarrollan un grupo de amigos en colaboración con otros
círculos de Podemos Migraciones de otros lugares de la
península que, a su vez, entregan ropa y productos de
primera necesidad al grupo ceutí.
El proyecto, según cuenta uno de sus impulsores, Reduan
Mohamed Jalid, surgió en una conversación de amigos sobre
los recortes, las injusticias sociales, y el incumplimiento
de los derechos humanos en casos de inmigración. Era el
momento de hacer algo y en Podemos Migraciones este grupo de
amigos encontró como hacerlo. Este es un círculo de la
formación política Podemos, pero independiente, en el que se
integraron Reduan Mohamed, como coordinador provisional del
círculo en Ceuta, y Amine Kassah Mozour, como secretario.
Ahora, y tras más de un año de trabajo, en la ciudad hay 14
personas trabajando desinteresadamente en este proyecto que
se dedica a la ayuda humanitaria a ambos lados de la
frontera. Y es que, aunque su principal reto es colaborar
con aquellos que están en campamentos en Marruecos, este
grupo también ayuda a gente desfavorecida de la ciudad.
Podemos Migraciones Ceuta colabora también con Digmun y
Pedagogía Ciudadana en actividades de reparto de comida y
productos básicos entre los inmigrantes que se encuentran en
Marruecos, así como en labores de recogida de ropa. El grupo
sale regularmente, cada quince días o un mes, a las zonas
más cercanas al perímetro fronterizo ceutí. En cada viaje,
cuenta Reduan, visitan un lugar distinto por lo que las
personas que encuentran van cambiando. No obstante, señala
que, en cada campamento puede haber en torno a las 150
personas. “Es una pena ver cómo estas las personas en estos
campamentos”, relata. Y es que, en cada salida los miembros
de Podemos Migraciones Ceuta encuentran escenarios
desoladores. Cerca del Biutz, en los alrededores de
Castillejos y en las cercanías de Tánger, hay centenares de
personas que tras un largo periplo desde su país de origen
malviven en medio de la nada aguardadno la oportunidad de
alcanzar el sueño europeo.
Para Reduan es una satisfacción, y así lo destaca, poder
ayudar a estas personas que con cada cosa que se les da, por
muy poco que sea, se muestran muy agradecidos. “Pasan frío,
no tienen qué ponerse y están hambrientos...”, relata el
coordinador del círculo ceutí para añadir que, de sus países
de origen, los inmigrantes “vienen con lo puesto”. La última
salida que han hecho fue el pasado sábado. En este viaje,
los miembros de Podemos Migraciones Ceuta, contaron con la
ayuda de lo recogido también por los círculos del Campo de
Gibraltar. La Línea, Algeciras y San Roque, bajo la
coordinación de Claudia Amado Rodríguez, colabora con el
circulo ceutí y a través de intermediarios hacen llegar lo
recogido hasta la ciudad autónoma, donde se almacena en la
casa de Reduan hasta que luego se saca hacia los campamentos
de inmigrantes en la zona fronteriza.
De momento, la ropa, el calzado y los productos de
alimentación se recoge de forma particular. El boca a boca y
las redes sociales son las que están dando a conocer Podemos
Migraciones Ceuta. A través de su perfil en Facebook los
ciudadanos pueden contactar con ellos para aportar su
granito de arena. Y es que, ayudar a los inmigrantes es
posible también más allá del Tarajal. Una ayuda que, al otro
lado, es necesaria y vital para hacer valer los derechos
humanos.
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