Es lo que parece que se están
dedicando a escribir los políticos, en estos días, mirando
hacia las elecciones de Andalucía, primero, a las elecciones
de comunidades autonómicas, pueblos y ciudades, más tarde y
para rematar y lograr tener todo el poder en sus manos,
poniendo la vista, también, en las elecciones generales de
noviembre o de diciembre.
Afortunadamente, muchos de nosotros ya pasamos de reyes, de
magos y de caras duras, que durante cuatro años no te miran
y cuando van a llegar fechas de este tipo tratan de
prometerte todo aquello que ellos saben que no te podrán dar
nunca.
Como ahora es fácil saber, desde aquí mismo, lo que a estas
horas está sucediendo en Dublín, en Hamburg, o en París,
trato de seguir a diario la marcha de las cosas, también, en
Andalucía, en esas elecciones anticipadas para que la señora
Díaz pudiera llegar a ellas con una renta un poco mayor que
la que tendría si se hubieran convocado algo más tarde.
Y vistas las noticias del otro lado del estrecho uno se
queda perplejo con la cantidad de mentiras y fantasmadas que
se dicen los unos a los otros y con esa capacidad que
adquieren los que se dedican a la política para mentir las
24 horas al día, durante 365 días al año.
Y es que, además de las lindezas que se lanzan los unos a
los otros, para ayer, por ejemplo, todos eran proclives a
que la mujer logre, tras estas elecciones, tener la llave
del Paraíso y ser la reina de lo divino y de lo humano. Eso
para ayer, para mañana ya vendrá otra cosa nueva.
Y es que, uno que conoce las limitaciones de un elevadísimo
número de “políticos” no se explica qué tipo de “cursos
acelerados” van haciendo para encuadrarse en cada una de las
festividades que se dan en las campañas electorales.
Susana Díaz ha perdido la ocasión de su vida para ver a uno
convertido en Judas, a otro en San Pedro, ella misma en
María y el de más allá en el propio San José, simplemente,
habiendo convocado las elecciones para el Domingo de Ramos,
muy pocos días después del día que están convocadas.
Y como los unos, con experiencia, quieren dar lecciones de
todo, ahí les ha salido Albert Rivera, nuevo en estas lides,
para frenar la osadía a alguno de los que creía ya saberlo
todo, aunque sólo fuera por la persistencia, en el
transcurso de los años, en concurrir a todas las elecciones
que haya. Así se ha mostrado el líder de Ciudadanos:”Si
falta experiencia es de no llevarse el dinero de los ERE, a
mucha honra”. Respuesta clara y contundente hacia el PSOE,
el partido que él solito se ha metido en este lío, sin que
nadie le forzara a ello y que ahora, con las encuestas que
van .apareciendo por ahí le ponen a los pies de los
caballos, cuando por su izquierda los aventureros esos de
sacar las gentes a las calles les van comiendo el terreno y
por su derecha, entre Ciudadanos y el PP, no le van a dejar
respirar.
En Andalucía, quien tiene que perder, de verdad, es el PSOE,
porque es el que tiene el poder, aunque no la mayoría que la
había logrado el PP, en las últimas elecciones.
El PP dudo mucho que logre los votos que consiguió en
aquella última ocasión, con lo que si ganando y todo no pudo
gobernar, al no ganarlas ahora ya veremos si será el primero
de la oposición o si hay alguien que vaya por delante.
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