Ayer fue uno de esos días, en esta
vorágine que se lleva viviendo en la ciudad por el alto
número de desempleados con los que cuenta, en los que se
puede pensar que Ceuta tiene mucho futuro y mucho campo por
explotar, por lo que invertir en Ceuta es hacer una buena
apuesta.
El hecho de que se inaugure una nueva nave de una empresa y
que, además, su propietario diga públicamente su intención,
aparte de modernizar todo su parque de vehículos y de
maquinarias, de generar nuevos puestos de trabajo es, en
estos momentos en los que se atraviesan, una extraordinaria
noticia.
El comercio y el empresariado de Ceuta siempre ha sido un
ejemplo para muchos en el resto de la Península, sobre todo
cuando comprobaron como la ciudad fue capaz de hacer una
transformación tan importante y en tampoco tiempo con motivo
de la apertura de la frontera de España con Gibraltar.
En aquella ocasión, el tejido empresarial supo con maestría
girarse y darse cuenta que al lado no sólo tenía un país con
el que comerciar como es Marruecos, sino que tenía la puerta
de todo un continente.
Si a eso, en estos momentos, se le suman las ayudas y la
fiscalidad que rige en esta ciudad, invertir en Ceuta se
puede decir, sin temor a equivocarse, que es hacer una
apuesta de futuro. Los ejemplos son claros, la ciudad ha
estado y está en el punto de mira de las mejores
franquicias, que nada más que oír su nombre estudian las
ofertas para que su marca tenga presencia en la misma. No
son las que están, sino las que tienen en cartera instalarse
en no mucho tiempo. Mercadona, por citar un solo ejemplo, es
la demostración de esa apuesta clara y decida por el
comercio y la creación de puestos de trabajo.
|