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Algeciras Club de Fútbol y Club Deportivo San Roque
afrontarán el derbi del domingo de forma distinta al de la
primera vuelta, al que ambos llegaron con demasiadas
necesidades a pesar de que la competición estaba recién
iniciada.
No obstante, el encuentro acabó siendo revitalizador para
ambos equipos, ya que los albirrojos, que salieron
victoriosos de la cita, pusieron en su casillero la primera
de las seis victorias consecutivas que le permitieron amasar
su mayor diferencia de puntuación de la temporada con su
principal rival por el liderato, el Gerena.
De hecho los de Mere, que llegaban en la cuarta plaza a tres
puntos del primer lugar, entonces ocupado por el Ceuta,
lograron en las siguientes semanas sumar hasta cinco puntos
más que el cuadro sevillano, al que llegaron a distanciar
asumiendo el liderato en cuatro puntos.
Ello coincidió además con el ‘Tourmalet’ de los algeciristas,
lo que concede aún más mérito a aquella parte del calendario
y hace albergar esperanzas de que vuelva a repetirse para
cimentar así el liderato del Grupo X.
El despertar
Pero las cosas tampoco fueron mal para el San Roque. Cierto
es que ante el Algeciras cayeron hasta tocar fondo,
enlazando seis derrotas consecutivas y acabando relegado al
último puesto de la tabla, pero en la jornada siguiente
comenzó su resurgir con una victoria muy trabajada frente al
Guadalcacín que fue la primera de otras muchas que logró
asentar a los rojillos en la zona media de la tabla
clasificatoria enlazando una trayectoria de diez encuentros
sin perder.
Fue el punto de inflexión que permitió a los pupilos de
Jonhy abandonar la zona de descenso directo e incluso mirar
hacia la zona alta, una inercia que aún mantiene a los
‘rojillos’ en una zona muy tranquila, viendo desde lejos la
lucha por la permanencia y mostrándose como un bloque
equilibrado y mucho más competitivo.
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fútbol / tercera división
