PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
  

 

 

OPINIÓN - SÁBADO, 14 DE FEBRERO DE 2015

 

OPINIÓN / EL ESQUINAZO

Cambios en RTVE de Ceuta
 


Jesús Carretero
opinion
@elpueblodeceuta.com
 

Se veía venir, desde hace tiempo, y la cosa ha tardado en llegar a su justo punto, porque hace ya varios años yo tenía muy claro que el que estaba apuntando a ocupar el cargo de delegado en Ceuta era Leonardo Campoamor, en primer lugar porque es un buen profesional, con agarraderas en las corrientes más izquierdosas de Ceuta y no mal visto por parte de la derecha, aunque sólo sea por su trayectoria familiar, muy poco pegados al “rojerío” y que con suma dignidad, en los años de la transición, no estaban lejos de la extinta UCD, grupo político que, con aciertos y con errores, ha sido, con diferencia, el grupo político que menos dio que hablar por hechos vergonzosos en sus actuaciones en puestos de gobierno.

Sin embargo, hasta hoy, la llegada de Leonardo Campoamor se ha demorado demasiado y este buen profesional ceutí ha tenido que pasar un tiempo en Melilla porque, aquí en Ceuta, el PP, en esto de la información, no sabe, ni ha sabido nunca, si estaba subiendo o si tenía que bajar la escalera.

Y me voy a explicar, en septiembre/octubre de 2013 el “rojerío” se hizo con la delegación de Ceuta, quedando Adelaida Julios, en terreno de nadie, mientras se asentaba en la “poltrona” de Real 90, Roberto Santamaría, uno de los de dentro, parecía que del PSOE, pero sin hacerle ascos a CCOO. Santamaría vino a Ceuta, desde uno de esos despachos políticos, reservados a enchufados, que controlaba el PSOE en La Rioja. Y, como siempre, el PP de Ceuta ni se enteraba de la jugada.

¿Quedaba todo concluido?. Sencillamente no, porque ya hemos dicho que la persona que estaba contando con ocupar ese puesto tenía que “emigrar” a Melilla y aquí se tendrían que ir jugando muchas carambolas y muchas cartas a la vez.

Entonces, Santamaría, además de contar con esa simpatía del PSOE de La Rioja, tenía otro apoyo nada despreciable en quien más controlaba las territoriales, que tampoco estaba cerca del PP.

Quedaba todo muy claro, las cartas principales de las partes contrarias al PP estaban apoyando a Santamaría, y el PP soñando con la luna de Valencia. Santamaría había jugado, había sabido jugar todas las cartas a su favor, con lo que incluso alguien que también podía tener alguna posibilidad de ocupar ese cargo, persona con experiencia y profesionalidad, como es el caso de Nuria Galán, quedara casi descartada, por mucho tiempo.

Aquí, es lo lamentable, no pesaba para nada la profesionalidad, pesaban más los padrinos, con lo que personas como Nuria Galán ni querría ni le gustaría moverse por ningún despacho, y sigue ahí, trabajando con seriedad, pero sin que nadie haya contado con ella, al menos de momento, para un puesto superior.

Ahora, y me alegro, la delegación de RTVE en Ceuta va a quedar en manos de Leonardo Campoamor, y la línea, es de suponer, irá por otros derroteros, pero dudo mucho que se acerque al PP, por razones obvias, ahora mismo.

¿Y Adelaida qué?. Es la pregunta que volvemos a hacer. En el terreno de nadie. Su situación actual no le debe llevar a demasiadas correrías. Nadie suelta prenda de a donde irá, pero sus mejores años como profesional los ha dejado aquí y soy testigo, en gran parte, de ello.

Afortunadamente aquí, sin levantar la voz, quedarán dos grandísimos técnicos Carlos y Roberto, que ni entran, ni han entrado en juegos de ninguna clase, que deben ser, como lo vienen siendo el alma de lo que es una emisora en la que los contenidos pueden ser mejores o peores, pero lo que sale al aire sale sin problemas de ningún tipo.

Todo esto podría ser normal, incluso con “okupas”, en algún momento, en cualquier tipo de reorganización de una empresa, pero deja de ser normal cuando un grupo político con la experiencia que se le supone al PP se ha dejado comer la merienda desde hace ya muchos meses. La época de cambios es esta, pero de cambios con puntos de mira claros, no cambios al buen tun-tún. ¡¡Ah, y cuidado con las enfermedades fantasmas y quien las avala!!.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto