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No esperaba menos, en un
aniversario que causó dolor a todos, seamos del credo o de
las costumbres que seamos. Eso debe quedar sentado, desde el
comienzo.
Sin embargo, cuando ha pasado un año de aquel accidente o
incidente, para que nadie se ponga a hacer elucubraciones
por su cuenta, vemos que todos aquellos inmigrantes, que
habían llegado antes de tal incidente, están donde estaban y
que aquellos otros que han llegado más tarde han ido a parar
al mismo sitio, un lugar que tiene una cabida determinada y
que ahora está con el doble de personas de las que debiera
acoger.
Sin embargo, y todo hay que decirlo, lo que no he visto, ni
tengo noticia de ello, en todo este año es que, aquellos que
gustosamente han ido a esa marcha solidaria, se hayan
decidido “solidariamente” a acoger en su casa a cuatro o
cinco de estas personas, para ir desalojando el CETI o para
que tal CETI pueda acoger a unos cuantos más.
Veo en la información que se ha dado en la prensa sobre la
Marcha Solidaria que, en torno a 400 personas asistieron a
dicha marcha, lo que nos indica que con que cada uno de
ellos hubiera cogido o se hubiera comprometido a alojar en
su casa a dos inmigrantes, ahora mismo el CETI estaría
dispuesto para poder alojar a un buen número de posibles
inmigrantes que pueden llegar a Ceuta, en el futuro.
Y como la solidaridad hay que entenderla en todas las
direcciones, ya me explicarán desde APDHA eso que alguno de
sus miembros dijo:”Los recursos que se están destinando a
perseguir a los inmigrantes y blindar las fronteras se
podrían invertir en procurar fronteras respetuosas con los
derechos humanos”. La frase es tan bonita como demagógica,
tan sin sentido como llamativa para oírla en una
manifestación, pero un galimatías a la hora de poner en
práctica eso que dijo alguien de APDHA y que él mismo dudo
mucho que supiera por donde comenzar.
Porque eso de “perseguir a los inmigrantes” ni es real, ni
se le parece, y eso de “procurar fronteras respetuosas con
los derechos humanos” fuera del terreno de hablar por hablar
no significa nada.
Hoy por hoy, existen territorios entre los que las fronteras
son casi inexistentes, tras unos acuerdos entre dos o más
territorios con unos compromisos serios y que son respetados
y cumplidos por ambas partes.
Aquí, porque esos acuerdos o no se han dado o no ha habido
capacidad por alguna de las partes, esa situación, según con
quien o con quienes, no se ha dado, pero todo aquel que
llega con su documentación en regla, regulada por su país a
tono con las relaciones que tiene con nosotros, entra y sale
sin que nadie le moleste, con lo que no voy a aceptar venga
de APDHA o de los representantes del “Caballo de Troya” es
lo de las persecuciones. Eso lo tengo muy claro.
Ahora bien, el representante de APDHA, que parece que
llevaba la voz cantante en la manifestación, estaría en su
derecho de hacer una auténtica cruzada para solucionar la
situación del África Sur Occidental que tan explosiva es,
pero para esa cruzada lo primero que tendría que saber es en
qué condiciones y de qué manera se hizo el reparto de África
en la descolonización, creando un mapa que hay hoy y que no
era antes de este reparto.
Las buenas y solidarias intenciones de APDHA como de otros
grupos organizadores de la marcha me parecen respetables,
pero viendo el pelaje de algunos otros colectivos que
parecían dejar oír su voz, también, en la manifestación, a
lo mejor “estamos en el caso de Satán increpando al pecado”,
y si no miren en la prensa la relación de estos
organizadores.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
