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No es la vez primera que, porque
se lo merece, traemos a colación, en estas líneas, la
ejemplaridad y el ceutismo de Nayim, a lo largo de sus años,
practicando su deporte, el fútbol, aquí en Ceuta, cuando era
un niño, luego en Barcelona, más tarde en Inglaterra, para
pasar al Zaragoza, donde ha dejado escrito en letras de oro
lo que es un deportista excepcional .
Intencionadamente, he elegido hoy este tema, cuando había
otras correrías que podían ser jaleadas por todos aquellos
que buscan, a diario, un algo distinto, con lo que poderse
entretener.
Yo preferí ir a lo positivo, como casi siempre y si, además,
porque lo es, es amigo mío el deportista del que escribo,
pues, tanto mejor.
Amigo mío sí que lo es Nayim y sin nada que nos debamos el
uno al otro, fuera de esa amistad simple y sincera, pero
mucho me temo que en otras áreas, áreas importantes de
Ceuta, e incluso desde donde se quiere “hacer patria”, con
el deporte, parece que no van por la misma senda que ha ido
y sigue yendo Nayim. Ellos se lo pierden y se lo van a ir
perdiendo cada vez más, porque contar con este deportista
entre los responsables de cualquier área deportiva, implica
estar “vendiendo una buena y positiva imagen de Ceuta”,
desde las alturas del mundo del deporte.
Sea como sea, el no haber sabido prestar atención, desde
hace años, a alguien que ha sobresalido en el fútbol, es
indicar, una vez más, que ciertos enchufismos y amiguismos
son más importantes que la propia imagen de Ceuta.
Sé y lo debe saber toda Ceuta, que Nayim no ha pedido jamás
nada, ni piensa pedirlo en el futuro, por lo que él, nacido
en Ceuta, sintiéndose ceutí por los cuatro costados, siempre
ceutí por encima de cualquier otra cosa, a lo mejor se ha
equivocado al no haber estado, a diario, aireando sus éxitos
deportivos, que siempre iban con un añadido especial hacia
su Ceuta.
Tras todo esto, me alegra que Fatima Hamed haya dado el
primer paso al proponer, el pasado jueves que, por parte de
la Ciudad, se inste a la Federación de Fútbol de aquí de
Ceuta, a que, con el nombre de Nayim, sea nombrado el nuevo
complejo deportivo del Morro.
Estoy de acuerdo con Fátima Hamed, a eso me sumo, como otros
muchos ceutíes, a los que no se les ha olvidado el golazo
que dio al Zaragoza el mayor triunfo de su historia.
Aquí es un ceutí que casi pasa desapercibido, a diario, el
jugador Nayim, allí, en Zaragoza, es un auténtico ídolo y da
lo mismo que vayas por el centro de la Ciudad, como por
cualquier barriada, para darte cuenta de que en la historia
futbolística de la Ciudad del Ebro, Nayim es el máximo
exponente , superando a los Villa, Marcelino, Carlos Lapetra
y demás.
Fátima Hamed sabe valorar lo que representa este ceutí en el
mundo profesional del deporte y recuerda como la actuación
de este deportista de Ceuta ha dado, incluso, para que en
muchas poblaciones de nuestro país aparezca el nombre de
Nayim, muy especialmente, por la tarde de gloria que dio en
una finalísima en la que ganó el Zaragoza. Pero además de
esto, Fátima Hamed no ignora que este deportista jamás ha
estado metido en nada que pueda avergonzarle a él o a los
que le rodean.
Un justo reconocimiento que recoge la Asamblea sería dar a
ese complejo deportivo del Morro el nombre de Nayim, Ahora
habrá que esperar a lo que sale de la Santa Casa Madre y de
la Federción de Fútbol.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
