Las organizaciones Amnistía Internacional y la Comisión
Española de Ayuda al Refugiado, junto con Caminando
Fronteras, Coordinadora de Barrios, Red Acoge y SOS Racismo,
quisieron recordar ayer a las 14 personas que murieron
ahogadas hace un año tratando de llegar a nado a la playa
del Tarajal. El acto, celebrado frente al Templo de Debod en
Madrid, se depositaron quince rosas, en memoria de los
catorce fallecidos y de la otra persona fallecida, en una
concertina, símbolo según las entidades de “una política
migratoria que no respeta los derechos de las personas
migrantes y refugiadas”.
Para estas organizaciones, el hecho de que las autoridades
españolas “no hayan investigado debidamente el ahogamiento
de 14 inmigrantes” frente a la costa de Ceuta después de que
la Guardia Civil “utilizase contra ellos material
antidisturbios de forma desproporcionada” pone de relieve
“el menosprecio hacia la vida humana que impera en las
fronteras de España con Marruecos”, han sostenido ambas en
el aniversario de la tragedia.
“Un año después de este trágico incidente, las víctimas y
sus familias siguen esperando que se haga justicia, mientras
la investigación ha sido ralentizada”, recriminó María
Serrano, portavoz de Política Interior de Amnistía
Internacional.
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