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El cliente marroquí se demostró ayer una vez como uno de los
pilares de la economía ceutí. El centro comercial, al que
acudieron centenares de personas debido a que es la única
zona de compras resguardada frente a días de temporal, se
‘colapsó’ de clientes llegados desde el otro lado de la
frontera y así lo demostraban el gran número de matrículas
de coche marroquíes. Además, la apertura de las tiendas del
centro el primer domingo de cada mes atrae a muchos turistas
que vienen a Ceuta estos fines de semana para aprovechar y
poder hacer sus compras durante dos días en lugar de uno.
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