UPyD-Ceuta en su compromiso con las cuestiones
medioambientales se ha reunido con la Asociación ecologista
Septem Nostra que desde su creación en 2001, se plantea como
objetivo principal promover la protección, conservación y
defensa del patrimonio histórico y natural de la Ciudad de
Ceuta.
A este respecto, y en busca de la inclusión de propuestas en
su programa político, UPyD Ceuta plantea como principales
retos ambientales para el siglo XXI el estudio y control del
fenómeno preocupante de la superpoblación, sin parangón en
ninguna ciudad de la Unión Europea, con una alta densidad de
población para los 19 km2 que ocupa Ceuta, englobando tanto
la población residente como la migratoria tanto legal como
la ilegal, ya que para la formación magenta se está
superando el peligroso límite de la “capacidad de carga”
soportable de su población en función del espacio y recursos
disponibles.
Asimismo junto con Septem Nostra, UPyD Ceuta se ha
comprometido a respetar y potenciar el rico –pero
desconocido- capital natural de la ciudad y sus entornos. La
formación magenta destaca que hay que respetar los paisajes
naturales caballas y se debe apostar por desarrollar la
producción local sostenible a partir de sus recursos marinos
y terrestres, todavía pendientes de una explotación a escala
sostenible, que podría ser una cantera laboral importante
para combatir las altísimas tasas de paro de nuestra ciudad
por medio del “empleo verde”. Pero lógicamente, aparte de
cambiar el sistema socieconómico pensando en las próximas
generaciones, UPyD considera que hay que tener en cuenta la
calidad de vida en nuestra ciudad, apostando por más zonas
verdes y lugares que promuevan la sociabilidad huyendo de
las plazas inhóspitas llenas de hormigón y frialdad así como
de la plaga de las viviendas ilegales, que presupone mucho
más que las políticas de las últimas décadas “obsesionadas
por la plantación de macetitas y estatuas, mientras el caos
urbanístico se apodera de la ciudad”.
La formación magenta manifiesta que Ceuta no debe ser sólo
el centro y las barriadas periféricas, sino que sería bueno
pivotar sobre un policentrismo, o varios barrios clave en la
ciudad para que no se concentre toda la vida económica,
cultural, etc... en un solo sector, inyectando más vitalidad
y equilibrios en una ciudad que se presenta como
“descompensada y medioambientalmente moribunda”, e insiste
en que Ceuta debe desarrollar o reactivar inexcusablemente
el plan, ya aprobado hace algunos años, Plan de desarrollo
de la Agenda 21.
Por último, UPyD, junto a Septem Nostra también defiende el
patrimonio histórico y cultural, abogando por la elaboración
inaplazable de un Plan de gestión de bienes culturales, ya
existente en gran parte del Estado español, el cual pone el
acento en la conservación del rico patrimonio histórico y
cultural de Ceuta, dando un uso alternativo no meramente
ornamental a este patrimonio, como los fuertes
neomedievales, la estación de la antigua sirena de niebla.
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