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“El terrorismo se ha convertido en el mayor reto, el mayor
desafío, de la comunidad internacional y por tanto de la
Unión Europea”. El ministro de Asuntos Exteriores, José
Manuel García Margallo, explicó a su llegada a Bruselas,
donde se reunió ayer con sus homólogos comunitarios, que el
terrorismo es la gran preocupación de los estados miembros,
y que por ello se van a dedicar numerosos encuentros para
intentar encontrar una estrategia global y conjunta con la
que hacerle frente.
“Hay que tener una estrategia global y compartida por la UE
que se pueda compartir con los aliados de la OTAN y de la
Comunidad Internacional. Porque esto nos afecta a todos.
Crímenes que afectan a la libertad de expresión, que atentan
contra la tolerancia religiosa. Contra los pilares en los
que se basa nuestra sociedad”, declaró el ministro.
“El terrorismo tiene una vertiente militar, de la que
hablaremos hoy, pero fundamentalmente en Londres dentro de
dos días. España forma parte de la coalición que hará los
esfuerzos necesarios para derrotar a Daesh. Tiene unos
aspectos de logística y hay que tratar de cortar las fuentes
de financiación. Intentar cortar el trasiego de personas
yendo y viniendo a los escenarios de combate.
El ministro ha adelantado que España se ha ofrecido a
organizar un encuentro, pero sin fecha ni detalles cerrados
por el momento, con los países del norte de África y Oriente
Medio. “Vamos a convocar en Madrid una reunión de la llamada
‘Vecindad Sur’, de los países que forman parte del sur del
Mediterráneo, incluyendo Siria, Jordania, etc. unión en la
que se hable del desarrollo económico”.
Margallo, en la línea de lo manifestado en la última semana
por otros dirigentes, ha insistido en la necesidad de
vigilar el tránsito de personas. “Parece clave controlar
todas las fronteras. Es el debate que estamos teniendo, y
España tiene una responsabilidad adicional porque tenemos
frontera en Ceuta y Melilla, frontera terrestre que hay que
controlar. Y por su puesto hay que controlar la frontera
turca, que también tiene un papel esencial en el tránsito de
esas personas que van y bien de zonas de conflicto”.
“A nosotros nos preocupa el control aéreo, pero también el
terrestre y el marítimo. Nosotros tenemos dos fronteras,
Ceuta y Melilla, y estamos a 13 km de Marruecos. El
controlar la inmigración, la entrada de personas que puedan
estar involucradas en esta lucha terrorista, es capital”,
insistió.
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