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Todavía no se han cumplido dos semanas desde que se
detectara que el vertido de fuel que estaba afectando el
litoral ceutí de forma alarmante provenía de una fisura de
una tuvería de la empresa Cepsa, cuando nuevamente ayer,
alrededor de las 08.35 horas volvían a saltar las alarmas
tras poderse comprobar que una fisura en uno de los tanques
de la factoría de Cepsa provocaba un importante vertido de
fuel-oil 180 a la playa de Benítez, procediéndose de
inmediato a activar el Plan Marítimo Nacional así como el
propio Plan de Emergencia en nivel 3 de la empresa Cepsa,
notificándose de inmediato a la Delegación del Gobierno de
esta nueva incidencia.
Por su parte, tal y como se ha informado desde la Delegación
del Gobierno que se mantiene el Plan Territorial que ya
estaba activado por el otro vertido detectado el pasado día
11 de diciembre y que tras las investigaciones realizadas se
pudo comprobar que se debía a la existencia de un poro en un
tramo soterrado, -tubería de fuel-oil de 14” de la compañía
Cepsa- estimándose como agente causante de la contingencia.
La fuga de fuel-oil 180 producida en la mañana de ayer
afectó a parte de la playa Benítez, colindante con la
factoría, cuyo vertido pudo lograrse contener en los
primeros 15 metros del arenal gracias al incansable trabajo
de los efectivos desplazados hasta la zona, quienes
inicialmente taponaron con la misma arena de la playa la
zona de donde salía el vertido para posteriormente cercar el
mismo y comenzar las labores de secado y recogida del
fuel-oil antes de que este pudiera acceder al mar y provocar
una catástrofe mayor.
Los principales trabajos de limpieza se llevaron a cabo con
los propios medios de Cepsa en su propia factoría,
procediéndose durante el transcurso de la jornada de ayer al
vaciado del tanque número 3 afectado, con el propósito de
evitar que se siguiera vertiendo fuel a la playa así como
iniciar su reparación a la mayor brevedad posible. Mientras
tanto, varias decenas de integrantes de los diferentes
servicios activados llevaban a cabo tareas de contención y
recogida del fuel-oil.
El Plan Marítimo Nacional activado, tal y como se ha dado a
conocer desde Delegación del Gobierno, se corresponde con el
nivel 1 por lo que desde Capitanía Marítima, perteneciente
al Ministerio de Fomento, se ha movilizado al BEC (Base
Estratégica para la Contaminación) con sede en Sevilla,
cuyos técnicos se encuentran ya a bordo del buque de SASEMAR
‘Luz de Mar’ para actuar en caso de ser necesario, y se ha
determinado que quede desplegada, de manera preventiva, una
barrera oceánica de 350 metros.
Tanto Cepsa, como los distintos departamentos involucrados
pertenecientes a la Administración General del Estado y de
la Ciudad Autónoma mantienen desplegados medios y efectivos
para minimizar y contrarrestar los daños ocasionados.
El consejero de Medio Ambiente, Gregorio García Castañeda,
fue uno de los primeros en desplazarse hasta la zona
afectada y preocuparse por la situación. Durante su
presencia allí atendió a EL PUEBLO y aseguraba que se ha
actuado con rapidez y que el principal objetivo, además de
cortar el vertido, era el de evitar que el mismo llegara al
mar y que eso se ha conseguido.
Además, indicaba a este diario que desde que se descubrieron
las primeras manchas de fuel por el litoral ceutí se
mantiene activados los protocolos de emergencias incluso
después de averiguarse cuales eran las causas de dicho
vertido, reconociendo también que desde entonces
prácticamente a diario se mantienen reuniones con todos los
servicios implicados para conocer al detalle los avances y
el estado de la situación.
Finalmente, Castañeda catalogaba de “mala suerte” que en tan
sólo dos semanas se hayan producido dos incidentes de estas
características, aunque también destacaba que esta vez se ha
podido actuar con rapidez y contener el vertido antes de que
produjera un daño mayor.
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Accidente ecológico
