Las avalanchas en el paso del Biutz se han convertido en la
tónica habitual del polígono del Tarajal tras la salida de
los vigilantes de seguridad que, hasta el pasado 1 de
diciembre, estaban contratados por los propietarios de las
naves. Ante la falta de dinero, los empresarios decidieron
dejar de contar con el servicio de Seguriber que, a través
de auxiliares de seguridad, controlaba el flujo de
porteadores en las filas para atravesar el paso del Biutz.
Ahora, la situación ha quedado en manos de los agentes de
Policía Nacional destinados a la zona y los tumultos son
continuos. La semana pasada se produjeron varios amagos de
avalancha que lograron ser disueltos sin heridos graves. Una
tónica que ayer se retomó. El entorno de la frontera se
llenó de porteadores que, tras tres días sin pasar al
polígono debido al cierre por las jornadas festivas,
llegaban con prisas para poder coger sus bultos.
Intervención de la UIP
Fuentes policiales informaron a Efe de que el colapso se
había generado en el entorno de las naves del Tarajal donde
centenares de marroquíes se acumulaban para regresar a
Marruecos con los bultos de mercancías. Los porteadores
provocaron una avalancha ante la que se vieron obligados a
intervenir los agentes de la Unidad de Intervención Policial
de la Policía Nacional que se encuentra en los polígonos. No
obstante, no se registraron heridos graves.
Disuelto el tumulto, la normalidad tomó las calles del
polígono en torno a las 12.30 horas, cuando el paso del
Biutz fue cerrado. En eso momento, los porteadores que
quedaban en la zona ceutí, se dirigieron a la frontera para
pasar desde allí a Marruecos. Un camino que algunos reducen
saltando el vallado que da a la carretera nacional. Y es
que, son muchos los que no llegan a la escalera construida
hace unos meses para facilitar el paso de porteadores y que
estos no pongan en peligro su integridad física en el
terraplén cercano al colegio Príncipe Felipe. Sin embargo,
es habitual ver saltando a porteadores e incluso ver
personas que han sufrido una caída.
Más control fiscal
Por otro lado, la Ciudad Autónoma sigue trabajando para
intensificar las medidas de control sobre las mercancías que
llegan al polígono y evitar el fraude fiscal. El portavoz
del Ejecutivo local anunció a finales de noviembre que se
trabajará para aumentar la vigilancia sobre los fardos de
ropa que llegan en trailers a la ciudad a través del puerto.
Para ello contarán con la colaboración de los empresarios
del polígono del Tarajal, con los que establecerán unas
pautas comunes.
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