Es lo que diríamos, en el ambiente
taurino, antes de comenzar la lidia, en cualquiera de los
festejos. Aquí, en Ceuta, ahora que la fiesta de los toros
ha sido anulada, creo que para siempre, los cambios van a
existir en el suelo, en el piso de ciertas calles, cosa que
resulta “más atractiva” y “más rentable” según para qué o
para quién.
Y es que el mármol del Revellín va a ser sustituido, dicen
que para evitar caídas, algo que parece que no se preveía
cuando se colocó ese mármol, no hace muchos años.
Y lo primero que habrá que hacer es preguntarse por los
técnicos que dirigieron o dirigen ciertas obras o que
asesoran a la clase política de la Ciudad, cuando estamos
hartos se ver como se pone un tipo de piso y a las dos
semanas o a los cinco meses no gusta o resulta peligroso,
sin que nadie tenga que dar responsabilidades por tanto
gasto absurdo, que no mejora la estética de la Ciudad, pero
sí puede mejorar ciertos números o ciertas situaciones, a
más de uno.
En los muchos años que llevo en Ceuta, cuando se votó la
Constitución ya estaba yo viviendo aquí, he visto como
determinadas vías de comunicación han cambiado, en repetidas
ocasiones, de aspecto y, naturalmente, con cambio de
material en el suelo, que ha conllevado muchos más gastos.
Ahora mismo, me viene a la memoria como, hace ya casi veinte
años, en la Avenida de África, en poco más de un mes se
pusieron y se quitaron, por tres veces, las losetas de la
acera que da a las puertas del Siete Colinas. Aquello se
hizo y allí no pasó nada. A lo sumo, se oía murmurar a
alguno, pero el alcalde de entonces, que no era el mismo que
hay ahora, haciendo lo que “creía” que tenía que hacer,
puso, cambió y recambió las losetas, sin el mínimo pudor de
lo que estaba haciendo.
Ahora, otro tanto de lo mismo, pero más en el centro, en el
Revellín, unas losetas que no llevan mucho tiempo colocadas,
ahora se muestran peligrosas y se van a cambiar por otras
más seguras, ya veremos si esas que se van a poner gustan al
próximo dueño del sillón principal del Ayuntamiento.
Ahora se van a retirar esas losetas de mármol verde y
amarillo, que han ocasionado muchas caídas y van a ser
reemplazadas por otras de granito.
En teoría, todo muy bien, muy bonito y seguro, ante todo,
pero ... ¿Cuánto va a costar esta obra?. Esa es la pregunta
que uniremos a la otra de ¿Cuánto costó la obra anterior?.
Respuestas a estas preguntas no se van a dar, por eso de que
“mejor es callar que responder con frases sin sentido”.
Y ahora nos hablan de informes técnicos que “aconsejan que
en lugar de mármol se coloque granito”. Muy bien por esos
informes, en busca de mayor seguridad pero ¿Hubo informe
alguno cuando se colocó ese mármol verde y amarillo que se
desplaza ahora?. Si hubo informes que aconsejaban ese
material habrá que pedir responsabilidades a quienes los
dieron, y si no hubo informes es que se actuó, en la
“operación chapuza”, sin más.
Y todo esto llega porque las caídas provocadas por las
losetas esas resbaladizas han llegado hasta los juzgados,
porque ha habido ciudadanos de Ceuta que, cosa que aplaudo,
han interpuesto demandas por haberse caído en el Revellín, y
todo eso, cosa que sigo aplaudiendo, ha obligado a pagar
varias indemnizaciones a ciudadanos que resultaron con
problemas por las caídas.
Todo ello, en orden, pero lo que no veo tan en orden es que
quienes colocaron esas losetas “peligrosas” no tengan
responsabilidad alguna. Algo debiera de tener que responder
a esto el Ayuntamiento ¿No es así?
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