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No me cabe la menor duda de que
hay quienes hacen carrera en la política, porque ahí cabe
todo, y porque de lo contrario, hoy, a mucho tirar, en unos
de esos ciudadanos que vivirían de lo que fuera saliendo,
sin orden ni control, con su palabrerío sin razonar nada y
actuando Dios sabe donde y cómo, tendríamos en las listas
del “todo vale” a más de uno de estos que viven de la
política, porque de algo tienen que vivir, pero sin aportar
nada digno a nuestra sociedad.
He dicho, en repetidas ocasiones, que están sobrando
políticos, de esos que “ponen el cazo” y a esperar un nuevo
mes y como siempre quedaría alguno que podría sonrojarse,
por no hacer nada en su actividad parlamentaria, de vez en
cuando, se agarran a cualquier problema de última hora, por
aquello de “ si sale con barbas San Antón y si no la
Inmaculada”. En esto, al menos estos días, habría que
colocar al senador de IU, Jesús Iglesias, quien pedirá
explicaciones, de aquí a un par de días, al presidente del
Gobierno, en el Pleno del Senado.
Y es que, el señor Iglesias parece que está muy preocupado
por la legalización, desde el Gobierno, de las “devoluciones
calientes” de inmigrantes en la valla de Ceuta y en Melilla.
Lo primero que habría que preguntar al ínclito senador es si
sabe donde está Ceuta y donde está Melilla, para luego
seguir preguntándole cual es el verdadero problema que viene
acarreando a Ceuta y a Melilla, desde hace años, este tipo
de inmigración.
Ya está bien de verborrea barata, al no saber hacer otras
cosas y ponerse a opinar de lo que no ven, no saben, no
entienden y prefieren no oír.
Y es que le podemos decir al senador de IU, que el poco
tiempo que le queda en el Senado, ya que en las próximas
elecciones él sabe que lo tiene muy negro para lograr el
escaño, en ese poco tiempo que haga algo que sirva para
mejorar, todas o cualquiera de las situaciones de nuestro
país, y que no pretenda que se legisle mirando a las
estrellas. ¡¡Vengase a Ceuta, senador!!. Vea como está la
situación de la inmigración clandestina y luego ya podremos
hablar, o váyase a Melilla, vea sobre el terreno lo que hay,
vea como trabaja la Guardia Civil, vea todo lo que aportan y
fíjese en lo que puede significar, en cualquier momento, la
cuestión sanitaria, y entonces, sólo entonces, estará
legitimado para poder hablar de este asunto, con verdadero
sentido.
Éste es uno de tantos, pero lo que ya roza el colmo de la
desfachatez es que, desde aquí mismo, desde la propia Ceuta,
personas a las que se les supone, sólo eso, se les supone un
conocimiento de la situación, se metan en todo el barro que
aparece en este terreno y que la propia coalición Caballas
“ve medieval la política del PP y cree que acabaremos
vertiendo aceite hirviendo a inmigrantes”.
Estos no saben por donde andan, aquí se ha formado un grupo
que uno duda de que sepan, vean u oigan, por lo que sólo
están a la crítica por la crítica ( en los Plenos de una
forma hipócrita, diciendo una cosa y por detrás actuando en
su propio provecho), y en la vida ordinaria haciendo
demagogia, para de esta forma “arrancar” cuatro votos más,
de otros que se hayan creído sus “cuentos chinos”.
Y es que Caballas se recrea, primero con un “es preciso
adecuar la legislación a una realidad como la de Ceuta y
Melilla, sin parangón en nuestro país”. Bueno, aquí parece
que les funcionó el sentido, para más tarde “dar la espantá”
con “esa necesidad no puede servir para convertir en legales
las flagrantes vulneraciones de los Derechos Humanos que se
cometen en las fronteras de las ciudades autónomas”.
Sin sentido alguno, sin aportar nada, pero lo que sí hacen
es faltar a quienes se están jugando la vida, para que la
seguridad sea mejor aquí.
Lo del senador Iglesias huele a podrido, lo de estos otros
sujetos da asco.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
