En su día, la comisaria de Interior de la Unión Europea,
Cecilia Malmström, no vaciló en acusar directamente a la
Guardia Civil de la muerte de 15 inmigrantes subsaharianos
en Ceuta el pasado mes de febrero. Una declaración que le
valió una denuncia de la Benemérita, pese a su rectificación
posterior. Sin embargo, la misma dirigente rechazó las
invitaciones del Gobierno de Mariano Rajoy para conocer in
situ la situación de Ceuta y Melilla, y se limitó a asegurar
que Bruselas estudiaría la petición de ayuda financiera
urgente que realizó a España para tratar de frenar el
problema fronterizo. Tras meses de silencio, la política
continental volvió al centro de la polémica al avisar al
Ejecutivo popular de que no puede usar la fuerza para
impedir que los inmigrantes irregulares crucen las fronteras
de Ceuta y Melilla.
Estas manifestaciones de Malmström ya han tenido una
respuesta contundente y fue la realizada ayer por el
delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González
Pérez, quien durante la rueda de prensa concedida la tachaba
de “reincidente”, y pese a asegurar que no iba a manifestar
lo que realmente le gustaría decirle a la comisaria de
Interior de la UE, ya que sería “políticamente incorrecto”,
si quiso aconsejar a Malmström que lo que debería hacer es
“antes de hablar, conocer”.
González Pérez se mostró convencido de que la comisaria de
Interior de la UE “desconoce profundamente la realidad tanto
de Ceuta como de Melilla, y como comisaria que és debería
conocer in situ cual es la situación, para posteriormente
poder evaluarla y tras dicha evaluación poder realizar
cualquier tipo de contestación a cualquier europarlamentario
o a cualquier persona que se dirija a ella”.
En cuanto a las advertencias lanzadas por Malmström sobre
que sancionará al Gobierno de España si continúa rechazando
de forma violenta a los inmigrantes, el delegado del
Gobierno fue aún más contundente en su respuesta y aseguró
que “si la señora Malmström recibiera toda la inmigración,
porque nosotros no la rechazáramos, seguramente su propio
país le diría a la comisaria que pensara en lo que dice”.
Igualmente, González Pérez, reconocía ayer ante los medios
de comunicación que en estos momentos, en los diferentes
campamentos existentes en territorio marroquí, cerca de la
frontera del Tarajal, existen alrededor de unos 2.000
subsaharianos que se encuentran esperando que surja la
oportunidad de poder cruzar a territorio español. A este
respecto, el representante del Gobierno de la Nación en
Ceuta aseguró ante los medios que la ciudad se encuentra
perfectamente preparada para neutralizar cualquier intento
de asalto por el perímetro fronterizo, a la vez que
manifestaba que los momentos en que se puedan producir estos
intentos son “impredecibles”.
González Perez recordó que existen “personas interesadas,
mafias, que ofrecen a estos inmigrantes una serie de
informaciones donde se les indica, supuestamente, los
momentos en los que podría existir menor vigilancia”, algo
que el delegado desmitió al afirmar que “la vigilancia en el
perímetro fronterizo es permanente y continua” a la vez que
advertía que ese tipo de informaciones no hacen más que
“exponer tanto los inmigrantes como a los miembros de las
fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que tienen la
obligación de proteger e impermeabilizar la frontera, a una
situación delicada”.
Durante su intervención, el delegado reconoció que existe
preocupación ante esta presión migratoria, máxime cuando los
intentos masivos de penetrar a territorio español que se
están produciendo en Melilla son casi continuos, aunque
también destacó que en Ceuta es más dificil que pueda
suceder lo mismo ya que la orografía ceutí es muy diferente
a la melillense y dificulta ese asalto masivo, a la vez que
reconocía que Ceuta cuenta con otros “flancos débiles” que
en su mayoría se encuentran en la zona marítima, para los
que “se han puesto algunos medios para evitar estos intentos
de asalto”.
Entre estas medidas, González Pérez destacó la colocación de
unas puertas hidráulicas en la parte inferior del puente del
Tarajal para que estas se cierren en el momento que se
observe algún intento masivo de inmigrantes. Dichas puertas
que ya están colocadas y operativas pueden ser activadas
para su cierre desde las propias oficinas de la frontera,
impidiéndose así que por debajo del puente del Tarajal los
inmigrantes puedan acceder a la playa.
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“Se va a realizar una modificación transversal de las
actuales leyes”
El delegado del Gobierno en Ceuta,
Francisco Antonio González Pérez, también fue preguntado
ayer sobre la reforma que se le quiere de realizar a la ley
de extranjería. En este sentido, el máximo representante del
Gobierno de la Nación en Ceuta manifestaba que el ministro
ya anunció estas reformas y no sólo en la ley de extranjería
sino que lo que se quiere llevar a cabo es una modificación
transversal, de cuatro o cinco leyes como las de
extranjería, menores, seguridad ciudadana, “porque estas
leyes, una vez pasado un tiempo, la realidad a veces las
supera y lo que hay que hacer es adecuar esas leyes dentro
del marco legal español, dentro del marco democrático y
dentro del marco comunitario también, ya que desde Bruselas
nos marcan muchas veces las pautas a seguir”.
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