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Las reuniones mantenidas este
lunes por el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, que se vio
acompañado de consejeros y de técnicos, han venido a poner
de relieve, en esta ocasión, que el máximo responsable del
Ejecutivo conoce bien las necesidades que Ceuta tiene y la
importancia del año, el 2015, en el que los ciudadanos están
llamados a las urnas.
Pero aunque es importante que Vivas haya dejado planificado
con la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio
Ambiente, Isabel García Tejerina, todo el ciclo del agua, la
regeneración urbana y el saneamiento del Príncipe, lo que se
antoja más importante es la apuesta por la formación.
Según ha informado el Gobierno de la Ciudad, a través de una
nota de prensa, en total serán 25 millones de euros, una
cifra que, dicen desde el Ejecutivo, garantiza la
continuidad de los planes de empleo y las políticas de
orientación, formación e inserción ya existentes y las
novedosas, como el programa específico para el
emprendimiento y el empleo joven.
Este apartado se antoja básico para la ciudad, ya sin
formación es muy complicado que una sociedad pueda tirar
para adelante. Y es que en Ceuta, los datos son
escalofriantes. El abandono escolar amenaza con tener una
juventud que, como pasa ahora, obligará a decir a los
políticos que el problema del paro en la metrópolis está,
sobre todo, en la dificultad que entraña que personas
carentes de formación puedan encontrar un empleo. Es de
reconocer pues que el Gobierno de Vivas, en esta ocasión,
está cumpliendo con su obligación y haciendo bien los
deberes. Ahora, con todos estos capítulos cerrados, solo
cabe esperar que las acciones puestas en marcha den su
frutos y no se termine, como pasa casi siempre, tirándose
los tiestos a la cabeza los que conforman el plantel de los
partidos políticos.
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OPINIÓN / EDITORIAL
