El ámbito de la educación sigue dando de que hablar.
Durante el curso pasado las manifestaciones y protestas
contra las políticas educativas aplicadas eran continuas y
este nuevo curso parece que no va a ser distinto. El día
antes de iniciarse el nuevo curso escolar se producía una
manifestación frente a las pueras de la Delegación del
Gobierno para mostrar el malestar por todo lo que hasta la
fecha viene aconteciendo en el ámbito educativo. En este
sentido EL PUEBLO ha elaborado unas entrevistas con cada uno
de los sindicatos del sector educativo que componen la Junta
de Personal Docente. En la de hoy, Francisco Lobato,
secretario general de la Federación de los Trabajadores de
Enseñanza de UGT responde a las cuestiones planteadas por
nuestro diario.
Pregunta.- La educación lleva un tiempo que viene sufriendo
lo que desde los sindicatos se suele llamar recortes en
cubierto. El pasado año fue un año muy complicado en todo el
ámbito educativo pero parece que este año no va a ser
diferente ¿Cuáles son esos recortes en cubierto que se
vienen produciendo y cuáles son los problemas que se
incorporan, a los ya existentes, este año?
Respuesta.- En los últimos cuatro años el Ministerio ha
recortado el cupo de maestros y profesores, en torno a los
50 docentes, esto no tiene nada de encubierto, son recortes
sin más. Pero al mismo tiempo el número de alumnos ha ido
aumentando, en torno a los 400 por curso. Para atender a ese
aumento de alumnos, el Ministerio debería haber incrementado
el cupo de docentes por encima de los 15 anuales, cosa que
evidentemente no ha hecho y eso es lo que denominamos como
recorte encubierto. Este curso ha sido aún más grave, ya que
además del aumento de alumnos, se ha elevado el número de
aulas, con la implantación de la FP Básica y las nuevas
aulas de Educación Infantil de la antigua Biblioteca
Municipal, todo ello con el mismo cupo de docentes que el
año anterior. Además del recorte encubierto, este curso nos
hemos encontrado con la imposición de un calendario en
contra de la opinión de la comunidad educativa; una
modificación en las instrucciones de principio de curso que
lejos de aportar soluciones, plantean más problemas; el
retraso inasumible del pago a los centros del dinero de los
comedores, así como el caótico cambio de gestión de las
becas para los mismos; el cierre del Centro de Profesores; o
la permanente carga de burocracia administrativa que
entorpece la labor educativa, entre otros muchos.
P.- Durante el curso pasado celebraron numerosas
concentraciones y manifestaciones, incluso este año, antes
de dar comienzo el curso se celebró una concentración frente
a la Delegación del Gobierno ¿Considera que estas muestras
de protesta sirven para algo teniendo en cuenta que desde la
administración siempre se resalta la poca participación en
las mismas?
R.- Sirven fundamentalmente para martillear las conciencias
de los responsables del Ministerio y para que los habitantes
de esta ciudad sean conscientes de la lamentable situación
en que se encuentra la Educación en Ceuta. La participación
debería ser mayor, pero si la comparamos con las
movilizaciones que se producen por otros temas, incluidas
las promovidas, en alguna ocasión, por las autoridades de
esta ciudad, están por encima de la media.
P.- Respecto a esa poca participación en las
manifestaciones ¿Echa en falta la presencia de más
profesorado, padres de alumnos y alumnado en las mismas?
R.- Como he dicho antes la proporción no es mala, pero si
todo el profesorado, padres y alumnos, que, con toda razón
se quejan a diario, participaran en las movilizaciones,
tengo la absoluta convicción de que el Ministerio
modificaría su política educativa y se resolverían muchos de
los problemas que arrastramos.
P.- Una de las medidas más criticadas ha sido el
calendario escolar que desde el MECD se ha implantado para
Ceuta, haciéndose caso omiso al propuesto por parte de la
Comunidad Educativa Ceutí ¿Cómo catalogaría esta decisión?
¿la considera perjudicial tanto para el profesorado como
para el alumnado?
R.- La decisión de un Ministerio que aprueba y publica un
calendario escolar propuesto por la unanimidad de la
Comunidad Educativa representada en el Foro de la Educación,
y que tras las protestas que sufrió el Ministro en la visita
a nuestra ciudad, lo retira y nos impone otro, absolutamente
arbitrario, sólo puede calificarse como la prepotencia de un
ministro que desprecia a esta ciudad. Su perjuicio radica
fundamentalmente en la errática distribución de los días no
lectivos, concentrados especialmente en el mes de octubre,
distribución que no superaría el más elemental análisis
pedagógico..
P.- Desde hace años se viene luchando por la creación de
nuevas aulas que eviten la masificación de estas. Estas
aulas no llegan y lo único que se ha logrado es que algunos
centros reconviertan sus espacios para poder atender toda la
demanda educativa, generando aún más problemas ¿Desde los
sindicatos que se puede hacer al respecto?
R.- Más que lo que se pueda hacer, es lo que se tendría que
haber hecho, la población escolar no ha parado de crecer en
Ceuta desde hace décadas, y desde el Ministerio de
Educación, tanto en los periodos de gobierno del Partido
Popular, como en los del Partido Socialista, no se ha
construido ningún nuevo centro educativo. Ambos gobiernos se
han limitado a poner parches, para resolver problemas
puntuales, habilitando algunos espacios que no reunían las
condiciones mínimas, para convertirlos en aulas. Esta
dejación nos ha llevado a la insostenible situación actual,
con unos veinte alumnos de cuatro años, que en septiembre no
se podían ubicar. La solución sigue siendo la misma,
construir nuevos centros, pero de forma urgente. Sólo nos
queda la esperanza, ya que el próximo año se celebran las
elecciones locales y generales, y todos sabemos lo generosos
que se vuelven los políticos en esa situación, de que se
haga realidad la última promesa del Ministerio, y el próximo
curso entren en funcionamiento dos colegios de tres líneas
cada uno.
P.- Corríjame si me equivoco, la ley educativa marca una
ratio de entre 20 y 25 alumnos (creo) pero en Ceuta esa
ratio ya está ubicada en un mínimo de 30 alumnos por clase
¿Cuáles son las problemáticas que esto genera, no sólo en el
profesorado sino también en el alumnado?
R.- La legislación marca un máximo de 25 alumnos por aula en
los colegios, pero esta cifra se aumentó a 30 en el año 2012
de forma transitoria. Esto le ha servido de excusa a la
Dirección Provincial para seguir aumentando la ratio hasta
la cifra actual de 30 alumnos por aula, aún a sabiendas de
que esta transitoriedad desaparecería, lo que seguramente
ocurrirá el próximo año 2015. ¿Qué va a hacer esta Dirección
Provincial, cuando el próximo año en todos los colegios de
Ceuta se esté incumpliendo la ley?. Pero es que además de la
gravedad que supone el incumplimiento de la ley por parte de
la administración educativa, la realidad es insoportable, el
profesorado está desbordado y no puede atender a sus
alumnos, muchos de los cuales necesitan una atención
personalizada, lo que genera una tremenda frustración. Los
alumnos de Ceuta no caben literalmente en las aulas y
lideran las cifras de fracaso escolar debido a esta
masificación, por más que lo nieguen las autoridades. Es
especialmente doloroso, que la atención a la diversidad
brille por su ausencia, perjudicando precisamente a los
alumnos que más apoyo y refuerzo educativo necesitan.
P.- ¿Por qué cree usted que el MECD tiene esa política
autoritaria e impositiva con Ceuta y Melilla?
R.- Creo que en general este gobierno se caracteriza por la
prepotencia que deriva de su mayoría absoluta, y el MECD
actúa de forma semejante. Pero como además en Ceuta no hemos
dejado de movilizarnos y denunciar sus actuaciones, su
soberbia les puede y se ceban especialmente con esta ciudad,
con más virulencia que en Melilla.
P.- Si finalmente el MECD hace lo que considera
conveniente, obviando los acuerdos y las negociaciones
alcanzados por los representantes educativos con la
Dirección Provincial del MECD ¿Qué pinta la figura del
director provincial y la de los propios sindicatos?
R.- La del Director Provincial, se la tendrá que plantear
él, los sindicatos, al menos FETE-UGT hemos defendido desde
siempre que la negociación se tiene que entablar
directamente con los responsables del MECD que tengan
capacidad de decisión, ya que es la única manera de alcanzar
acuerdos que se cumplan, sin necesidad de ser refrendados
por otro responsable. Con esta aspiración vamos a seguir
batallando, para que o bien con este, o bien con otro
gobierno, se formalice una verdadera Mesa de Negociación.
P.- ¿No se sienten ninguneados?
R.- Evidentemente, ya he manifestado anteriormente que este
Ministerio actúa de forma prepotente, despreciando, no sólo
a los sindicatos, si no al resto de componentes de la
comunidad educativa, incluyendo a la Dirección Provincial.
Lo que no van a conseguir por más que nos ninguneen, es que
dejemos de alzar nuestra voz para seguir denunciando, no
sólo este, si no todos los ataques al sistema educativo de
nuestra ciudad.
P.- ¿Cuánto tiempo más se puede soportar una situación
como la que viene viviendo desde hace tiempo la comunidad
educativa?
R.- No se puede esperar más tiempo, la situación ya es
insoportable y lleva algún tiempo siéndolo. Lo único que
mantiene la educación en Ceuta, es la profesionalidad de los
docentes, que a pesar del maltrato del Ministerio y de las
difíciles condiciones en que desarrollan su trabajo, se
esfuerzan cada día para llevar a cabo lo más dignamente
posible su labor educativa.
P.- Desde el aspecto sindical, ¿cómo se presenta este
curso que lleva tan sólo veinte días en marcha?
R.- Con muchísimos problemas, muchos de los cuales los he
mencionado anteriormente. Pero en el plano meramente
sindical, lo más significativo son las elecciones a la Junta
de Personal Docente, en las que esperamos que haya una gran
participación, como en elecciones anteriores, por la
legitimación que ello supone. Lógicamente aspiramos a volver
a ganarlas.
P.- La LOMCE entraba a partir de este curso en vigor ¿Qué
supone esta nueva ley para el sistema educativo?
R.- No voy a repetir las numerosas críticas que esta ley ha
suscitado, porque creo a todo el mundo al tanto de las
mismas. Pero por si alguien tiene dudas voy a hacer una
simple reflexión. Es una ley impuesta por el gobierno del
Partido Popular, que no ha contado con el apoyo de ningún
otro partido del arco parlamentario ni de ningún estamento
educativo, y que ha conseguido el dudoso honor de concitar
el acuerdo de todos los partidos, para derogarla en el
momento en que este gobierno deje de tener la mayoría
absoluta.
P.- Usted que está metido en el mundo sindical ¿cuáles
son las reivindicaciones que le trasladan los docentes?
R.- Coinciden en su gran mayoría con las que he descrito a
lo largo de esta entrevista, y las que habitualmente
denunciamos, ya que mal estaríamos actuando, si nuestras
reivindicaciones fueran diferentes de las que nos
manifiestan los docentes a los que representamos.
P.- Otro de los graves problemas son los retrasos en las
becas, así como el cierre de comedores escolares ¿Cual es la
postura desde UGT ante esta situación?
R.- En estas dos cuestiones, que afectan a los alumnos de
clases sociales más desfavorecidas, la insensibilidad del
Ministerio es sangrante. Año tras año, el importe de las
becas llega mucho después de que los padres de los alumnos
hayan tenido que desembolsar el dinero de los materiales
escolares, teniendo que hacer en la mayoría de los casos un
sacrificio considerable. El retraso en el pago a los centros
del dinero de los comedores y el despropósito que ha
supuesto la modificación de la gestión de las ayudas al
comedor, es otro disparate de este Ministerio. Desde FETE-UGT
seguiremos instando al Ministerio, al igual que llevamos
haciéndolo durante años, a que se agilice todo lo
concerniente a las ayudas para los alumnos más
desfavorecidos, ya que las trabas y retrasos, suponen un
castigo para aquellos que más ayuda necesitan.
P.- Para finalizar, ¿Cuál sería para usted el sistema
educativo ideal, o dicho de otra forma, qué cambiaría del
sistema educativo actual y que dejaría del mismo?
R.- En la situación actual, con el retroceso que se ha
producido en conquistas sociales que creíamos inamovibles,
la primera meta que debemos imponernos, es la de recuperar
el terreno perdido. Pero ciñéndonos al ideal en el ámbito
educativo, creo que la solución sería muy simple, si los
políticos actuaran con honestidad y generosidad. Diseñar,
con el consenso de todas las fuerzas políticas, un sistema
educativo estable y duradero en el tiempo, donde primen los
intereses de los alumnos, la calidad educativa, y no los
intereses partidistas.
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