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La tormenta de comentarios
originada en nuestra ciudad a raíz de la presentación de los
Presupuestos Generales del Estado 2015, nos demuestra que
nos enfrentamos día tras día a mentiras y medias verdades
sobre todo tipo de situaciones. Los políticos se aferran a
puestos y a luchas entre ellos por el poder, que les llevan
a declarar estupideces que cada vez nos engañan menos y nos
encienden más.
El interés por el bien de las personas gobernadas ha
desaparecido desde que políticos y ciudadanía viven en dos
planos de la existencia totalmente diferentes. Algunos no
saben lo que cuesta un café o el autobús, y no podrían
sobrevivir ni un mes con el salario mínimo. Los partidos
políticos se enfocan al poder, a ese Anillo Único para
gobernarlos a todos. ¡Mi Tesoro!. A esa necesaria mentira
que les dé una pequeña ventaja, que aliente a sus vástagos y
que reafirme la ideología de sus zombies. Lo malo, es que al
final quienes padecemos todo esto somos esa gran mayoría de
hobbits que habitamos en la Comarca y que estamos hartos de
que un día se rían de nosotros los orcos de Moria, otro día
los Nazgul, al día siguiente el Balrog, luego los Uruk-Hai
de Isengard, el troll de las cavernas y, últimamente, hasta
el pato Donald.
Nuestros políticos deberían entender que si existe una
crisis terrible uno debe decir “Hay crisis” y dejar los
brotes verdes para los invernaderos. Si pierdes las
elecciones hay que decir “hemos perdido las elecciones”. Si
eres líder de la oposición y no tienes nada que aportar para
que las cosas vayan mejor es mejor que te quedes callado a
decir tonterías demagógicas. Si subes el IPSI dirás “subimos
el IPSI”. Y si la Inversión del Estado en Ceuta para 2015
desciende un 42 % hay que decir .... Solo así se recuperará
la credibilidad perdida.
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OPINIÓN / EDITORIAL
