Nossair, el joven marroquí acogido por una familia de Ceuta,
parece que está viendo cómo su futuro se comienza a aclarar
y parece que finalmente podrá renovar su permiso de
residencia y quedarse, tal y como él y su familia de acogida
quieren, en Ceuta para labrarse un futuro que en Marruecos
con toda seguridad sería imposible.
Después de varios meses de lucha parece que la solidaridad
de un empresario local, que quiere permanecer en el
anonimato, dará la oportunidad a Nossair en permanecer en
Ceuta y así continuar con su vida. La madre de acogida de
Nossair, Mar Ruedas, no podía ocultar su alegría ante este
hecho y no tenía palabras para agradecer al empresario local
la decisión de contratar a su “hijo” y así conseguir que
pueda regularizar su situación, tal y como se exigía desde
Extranjería.
Nossair ya cuenta con su contrato laboral y con el seguro
médico privado que se exigía desde Extranjería y además de
poder recuperar su permiso de residencia también podrá
formalizar su matrícula y comenzar a realizar los estudios
pertinentes con el fin de labrarse un futuro.
Ruedas, después de las continuas trabas que ha tenido que ir
sorteando durante todo este proceso, espera que ya no exista
ninguna más y que finalmente se deje al joven y a su familia
de acogida vivir tranquila y que Nossair pueda centrarse en
lo realmente importante hoy por hoy para él, su trabajo, sus
estudios, su deporte, y como no su familia y sus amigos.
Toda la nueva documentación fue presentada el pasado viernes
a Extranjería con el fin de agilizar todo el proceso de
regularización y lograr llevar nuevamente el agua a su
cauce, aunque Ruedas asegura que pese a que se ha logrado el
permiso de residencia gracias a que ya cumple todos los
requisitos, seguirán luchando por conseguir que se le
conceda el permiso por arraigo.
Por último, este asunto ha llegado a la Defensora del
Pueblo, Soledad Becerril, quien recientemente se puso en
contacto con la madre de acogida del joven Nossair para
ofrecerle su ayuda en todo lo que esté en su mano.
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