El Gobierno de la Nación ha desvelado las cantidades que
lleva gastadas en los perímetros fronterizos de Ceuta y
Melilla, dando respuesta así a una pregunta parlamentaria
formulada por Jon Iñarritu, de la formación Amaiur y
encuadrado en el Grupo Mixto de la Cámara Baja, según el
documento al que ha tenido acceso este periódico.
El parlamentario vasco en su pregunta dirigida a la Mesa del
Congreso planteaba una interpelación dirigida a conocer cuál
ha sido el coste de la instalación y mantenimiento de la
valla fronteriza de Ceuta desde su apertura, pidiendo las
cifras divididas por años.
Según la respuesta facilitada por el Gobierno, el importe de
las actuaciones llevadas a cabo en las vallas fronterizas de
Ceuta, a partir del año 2005 hata el 2013, financiadas con
cargo a los presupuestos de la Secretaría de Estado para la
Seguridad, suman un montante de 24.669.836 euros.
Cifra en la que no se cuentan los gastos derivados de de los
agentes ni de los refuerzos de la Guardia Civil y de la
Policía Nacional, ya que se explica que es solo partidas
pertenecientes a las inversiones realizadas.
La pregunta parlamentaria también interesaba por la cifra
invertida durante en el mismo periodo en las vallas
fronerizas de Melilla. Así, el Gobierno, en la misma
respuesta dice que la inversión asciende a más de cuarenta y
seis millones de euros. Si sumamos esta cifras, en el
periodo comprendido entre el año 2005 y el 2013, el Gobierno
destinó diariamente casi 22.000 euros a este menester, todo
ello con independencia del gasto que supone el factor
humano.
En esa misma pregunta, el diputado de Amaiur interrogaba al
Gobierno sobre el número de personas que habian superado la
valla instalada. En Ceuta, en 2012 no hubo inmigrante que
saltara la misma, mientras que en 2013 fueron dos las
personas que lo lograron.
En este sentido, destacar que la orografía del territorio
ceutí ayuda, ya que existen zonas en las que la altura de la
valla supera los nueve metros.
No pasa lo mismo en el perímetro de Melilla, en el que en el
año 2012 fuero 390 personas las que saltaron la valla,
mientras que en 2013, el número fue de 830 personas.
Sin duda, el mayor desembolso en la última década tuvo lugar
en 2005, con los primeros asaltos masivos a ambas
alambradas. El Gobierno socialista invirtió entonces más de
31 millones en los doce kilómetros de perímetro melillense y
casi ocho en el los ocho kilómetros de la frontera ceutí. Un
dinero que sirvió para elevar hasta los seis metros de
altura las vallas y dotarlas de todo tipo de medios de
detección física.
Hasta entonces, es decir desde 1996, en el caso de Ceuta, y
1998, en el de Melilla, ambos obstáculos no eran más que un
cúmulo de alambradas y fosos que, en la práctica, eran
superados con mucha facilidad por los extranjeros que
pretendían entrar a las ciudades.
En este sentido, recordar que Ceuta vivía un problema de
inmigración importante en los años 1995 y 1996. En esas
fechas y en la conocidas entonces como murallas del Angulo
convivían unos 700 inmigrantes, con abundante de presencia
de argelinos y que tuvo su punto más álgido con lo que se
conoció como la revolución del Angulo, cuando en las
murallas se desató una batalla campal el 11 de octubre. Pero
pese a los obstáculos, el problema de la inmigración no cesó
durante esos años, y así en Ceuta entraron de manera
irregular 3.150 en 2004; 2.324 en 2005; 2.356 en 2006; 848
en 2007; 313 en 2008; 428 en 2009; 522 en 2010; 1.363 en
2011; 597 en 2012 y 1.623 en 2013. Con lo que en esta
década, en Ceuta entraron un total 12.524 inmigrantes.
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