Pocos minutos después de las 20.00 horas, quizás porque se
estuvo esperando a que se sumara más personas a la
concentración, Caballas dio comienzo el acto de repulsa por
el genocidio palestino y en homenaje a las víctimas de esa
masacre.
El acto dio comienzo con la lectura de un manifiesto en el
que la coalición, además de cifrar la cantidad de fallecidos
y heridos que se han cobrado los bombardeos del ejército
israelí quiso manifestar que la coalición cree en una
sociedad inclusiva, intercultural, crítica, tolerante,
solidaria, activa y participativa, resaltando que sus
valores más allá de ideologías, creencias, sectarismos,
estatus social, etc. Durante la lectura del manifiesto hizo
especial mención a que cualquier principio fundamental es la
dignidad de las personas y así lo establece la Declaración
Universal de los Derechos Humanos.
La concentración de ayer fue un homenaje al pueblo
palestino, pero especialmente a los niños, manifestándose
que son precisamente los pequeños quienes pagan las
consecuencias más dolorosas de los ataques israelíes
producidos por “un odio cuya herencia reciben como un legado
de dolor y desconsuelo”.
Para finalizar, los convocantes leyeron todos y cada uno de
los nombres de los pequeños palestinos que han perdido la
vida tras los ataques del ejército israelí.
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