Agentes de la Unidad de Intervención Rápida de la Policía
Local han dado un nuevo golpe al narcotráfico y detuvieron
ayer a tres personas que en el interior de un vehículo
estaban en posesión de más de seis kilogramos de hachís.
Sobre las doce y media de ayer y cuando agentes de la
mencionada unidad realizaban servicio de vigilancia en
barriadas observaron como en la parte trasera del
polideportivo Díaz Flor un individuo, que se encontraba en
el interior de un vehículo turismo con matrícula marroquí,
al ver el furgón policial emprendió la huida a pie hacia
Miramar Bajo.
Los agentes de la unidad de la Policía Local iniciaron, al
momento, una persecución del mismo, localizándose, al mismo
tiempo, en el interior del vehículo a dos mujeres junto con
varias medias que contenían 599 bellotas de hachís, que tras
ser incautadas arrojaron un peso total de 6250 gramos.
Los agentes de la UIR se coordinaron para llevar a cabo la
persecución del individuo con varias patrullas del 092,
siendo localizado el mismo en los cañaverales de la parte
trasera del Centro Penitenciario de los Rosales.
Tras darle alcance, los agentes procedieron a su detención,
en la que participaron dos unidades del 092 y dos
funcionarios de la mencionada unidad.
El mencionado individuo, junto con las dos mujeres que
estaban en el interior del vehículo, todos de origen
marroquí, fueron presentados en las dependencias de la
Jefatura Superior del Cuerpo Nacional de Policía, donde se
instruyeron las diligencias. El vehículo quedó a disposición
judicial.
No es la primera ocasión en la que efectivos de distintas
unidades de la Policía Local llevan a cabo una operación que
se salda con la incautación de droga, sobre todo hachís y ha
realizado en esta parcela actuaciones de bastante calado.
Ahora y con la entrada en funcionamiento en las barriadas de
la UPAC, que están, según dijo hace varias fechas la
consejera de Gobernación, Yolanda Bel, en coordinación con
la UIR, la vigilancia se está extremando más, aparte de la
que ya se venía haciendo.
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