Magia. Si algo caracteriza San Juan es la magia que rodea
todo lo que tiene que ver con la noche más corta del año.
Los hay quienes conjuran al amor, a la suerte o al dinero.
Todo vale si el fuego está por medio. Y es que, la tradición
de esta fiesta de origen pagano manda que la hoguera sea el
centro de todo. En ella se queman deseos con la esperanza
que en los siguientes 365 días se cumplan, se salta buscando
la buena suerte o se deja arder el pasado, como hacen muchos
estudiantes alimentando el fuego con sus apuntes después de
un año de intenso trabajo. Cada cual lo celebra a su manera,
pero todos en la playa. La Ribera y el Chorrillo se
volvieron a inundar ayer de personas que celebraron el
solsticio de verano. Desde última hora de la tarde, familias
y grupos de amigos iban buscando su hueco en la arena para
esperar hasta la medianoche, la hora más mágica. Cuando el
reloj pasó de las doce, los más valientes se metieron en el
agua mientras el Juanillo ardía. Este año, como no podía ser
menos, el Príncipe ha protagonizado también esta fiesta y es
que, el muñeco que ardió estaba inspirado en el personaje de
Faruq de la popular serie de Telecinco cuya historia, de
amor y delicuencia, se ubica en la ciudad.
El momento más esperado fue el de los fuegos artificiales
que, a pesar de la crisis y los recortes presupuestarios,
volvieron a estar a la altura. Se hicieron de rogar y no fue
hasta cinco minutos después de las doce cuando el cielo se
inundó de color durante un cuarto de hora. Una ocasión que
muchos aprovecharon para hacer su ‘selfie’ de la noche de
San Juan. Este año están de moda los autoretratos y los
ceutíes no se han quedado al margen. Desde la arena o desde
el paso. La Ribera y el Chorrillo quedaron fotografiadas en
todos sus ángulos. Ceuta y los caballas daban así la
bienvenida al verano con una fiesta en la que, el
presidente, Juan Vivas, deseó que la hoguera simbolizara “la
voluntad de los ceutíes de erradicar todo aquello que nos
puede perjudicar, los comportamientos de intransigencia, la
confrontación gratuita, la crisis, o el paro”. Asimismo,
mostró su esperanza de que la luz y magia de San Juan
llevará a todos los ceutíes “confianza, optimismo y
esperanza”. Un deseo que seguro que muchos escribieron ayer
en un papel para hacerlo arder y conjurar la magia de San
Juan en su favor, un año más.
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