La familia que el pasado miércoles ocupaba de forma ilegal
una vivienda de la barriada del Morro, finalmente no aceptó
la ayuda ofrecida por los servicios de Asuntos Sociales y,
pese a que se le reubicó nuevamente en una de las pensiones
con las que la Ciudad mantiene un convenio para hospedar a
las personas más desfavorecidas, decidió no pernoctar en
dicha pensión, desconociéndose en la actualidad por los
Servicios de Asuntos Sociales, el paradero de esta familia
que hay que recordar que cuenta con cuatro hijos menores de
edad y la mujer en avanzado estado de gestación.
Tal y como pudo saber EL PUEBLO, a través de la propia
consejera de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed Tonsi, la
familia lleva poco tiempo empadronada en la ciudad, tan sólo
desde el pasado mes de septiembre de 2013.
El matrimonio, él de Ceuta y ella de Marruecos, logró
empadronarse en la ciudad gracias a que una hermana del
hombre los acogió en su domicilio, surgiendo todos los
problemas el pasado lunes cuando se acercaron hasta los
Servicios Sociales para solicitar ayuda ya que por una
discusión fueron expulsados del domicilio y se encontraban
en la calle con cuatro niños pequeños.
La consejera reconoció que desde ese mismo momento, los
responsables del área estuvieron realizando las gestiones
pertinentes hasta que se les consiguió ubicar en una pensión
en la cual tan sólo pasaron una noche ya que al día
siguiente aseguraron que habían encontrado una casa, la cual
resultó ser de la que fueron expulsados el pasado miércoles
ya que habían entrado de ocupas.
Finalmente, Rabea Mohamed, que ayer se interesaba por la
situación de esta familia, conoció que lejos de aceptar la
ayuda que desde los Servicios Sociales se les estaba
ofreciendo, decidieron no pernoctar en la pensión,
desconociéndose en la actualidad el paradero de la misma.
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