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Y no sólo en las europeas, también
en las municipales, en las autonómicas o en las generales.
Con razón, decía el viejo profesor, D. Enrique Tierno
Galván, que era lícito hacer promesas en las elecciones,
aunque luego esas promesas no se cumplan. Esto lo decía, una
vez entrada la democracia, pero también cuando la democracia
para algunos era un sueño y para los de mi generación era
algo desconocido.
Aquellas manifestaciones, en las clases, a las que allá por
los años 60 y muy poco tuvimos la suerte de asistir, a los
de mi generación nos ponía los ojos como platos, porque
siendo ya “casi veinteañeros”, el término democracia no
sabíamos donde poderlo situar.
Pero aquello pasó, posteriormente él pudo decirlo en mítines
y llevarlo a cabo tanto en sus andanzas cuando se presentaba
a unas elecciones generales, como cuando concurrió a unas
municipales, y si bien es cierto que el viejo profesor decía
muy bien todo lo mucho que sabía, no supo siempre tan bien
todo aquello que estaba “predicando”, porque de haberlo
sabido, estoy seguro de que “la movida” no hubiera existido.
Pero no era por estos derroteros por los que yo quería ir
hoy, sino más bien por las propuestas de algunos de los
grupos que se van a presentar a las Europeas, como es el
caso de UPyD.
Y puede tener razón el partido político de Rosa Díez cuando
propugna que en Europa debiera crearse la Fiscalía
Antifraude.
Yo, de entrada, diría que sí que sería algo muy positivo,
pero el problema no está en los que digamos y alabemos desde
una columna periodística, el verdadero problema va a estar
en que los partidos de peso, los que tienen una amplia
representación, desde España, Italia, Francia o Alemania,
pongamos por caso, dirán lo que más les convenga a ellos, y
en estos terrenos los grandes partidos, o parte de sus
militantes están “tan salpicados de barro” que dudo mucho
que se esfuercen en que esto salga adelante.
UPyD que, con sus medios, aunque lentamente, va intentando
hacerse un hueco en el espectro político, hasta ahora, como
nunca tuvo puestos de responsabilidad, tampoco ha tenido la
ocasión de que nadie les haya pillado, en ningún renuncio, y
por ello puede hablar, puede proponer, se puede postular
como ejemplo a seguir, pero a la hora de decidir sus fuerzas
seguirán siendo limitadas.
Aun así, sus propuestas ahí están y ya veremos si hay quien
las apoye o si tales propuestas van al baúl de los
recuerdos.
Tiempo al tiempo, y como este partido, aunque pequeño, sigue
pensando en crecer cada día un poco más, hay otra propuesta
que quieren llevar a Europa, como algo propio y que nadie,
hasta ahora, la había sacado, como es “un mayor control
efectivo de los lobbis”. La idea, por encima de todo, es que
haya una mayor trasparencia a las diversas políticas
desarrolladas por las instituciones de la UE.
Aquí queda algo nuevo. No sé si en la campaña, en los
mítines o en los cara a cara alguien va a secundar esto, o
si cada grupo va en busca de lo que les proporcione algo más
para eso de “¿Qué hay de lo mío?”, en vez de buscar aquello
que, de verdad, marca los pasos para salir de la situación
de política de corrupción, de política de crisis y de falta
de “detalles” que no marquen unas simples siglas, sino la
marcha de una sociedad. Aunque no siempre estemos de acuerdo
con UPyD sus propuestas, estas que he citado, debemos
aplaudirlas.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
