El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, confesó que
está en deuda con Ceuta desde aquel “11-M” cuando la ciudad
fue la primera que mostró su solidaridad con la capital de
España, “de la que era hacía pocos meses alcalde”.
Una palabras muy emotivas con las que el dirigente del
Partido Popular arrancó su intervención en el acto electoral
de las Europeas celebrado en el Hotel Tryp de Ceuta, en el
que también tomaron parte la número 29 de la lista que
encabeza Arias Cañete, Rocío Salcedo, el presidente del PP
de Ceuta, Juan Vivas, y el coordinador de campaña, Emilio
Carreira.
El PP afronta esta campaña electoral con conciencia de la
responsabilidad y “tenemos que ser consciente de la
importancia que tienen estas elecciones”.
Ruiz-Gallardón alegó que siempre hemos sido europeos, pero
“España estuvo muchos años aislada” y comercial y
políticamente era cuando se decía “que Europa empezaba en
los Pirineos”, aunque hoy, aseguró el ministro de Justicia,
no empieza en esos montes, “hoy, viniendo del Sur, Europa
comienza en Ceuta” y es su frontera, “aunque no hay que
mirarla como un lugar donde algo termina, sino como un lugar
donde algo empieza”, agregó.
Agradeciendo el esfuerzo realizado por muchas personas,
Ruiz-Gallardón dijo a las 200 personas que asistieron al
acto que esto es así, y “es por eso que ante unas elecciones
europeas no podemos pensar que se trata de algo que nos
resulte ajeno”.
El razonamiento de la importancia de estos comicios es
porque “todo lo que hacemos, desde Justicia o por la Ciudad
Autónoma, por citar unos ejemplos, en un porcentaje superior
al 60%, está determinado previamente por lo que han decidido
las autoridades europeas”. “Y esto no lo decimos
lamentándolo, lo hacemos celebrándolo”, matizó.
Pero estas decisiones no nos son ajenas, dijo, “porque las
hacemos nosotros a través de las instituciones europeas y
desde su Consejo”, y a partir del próximo día 25 de mayo “a
través del Parlamento Europeo, que será órgano que tome las
grandes decisiones de todas las normas”. Esto es de una
importancia vital, explicó el ministro de Justicia, “ya que
nos van a afectar a todos nosotros”.
Eligiendo el futuro
Así, Ruiz Gallardón justificó el lema que el partido está
usando en este campaña “y como estamos eligiendo nuestro
futuro”, señaló que en estos comicios hay cuatro
posibilidades.
La primera de ella es no acudir a votar, abstenerse, “que es
la peor de todas”, agregando que pensar que estas elecciones
“no nos interesan es un error”. Ruiz Gallardón pidió un
esfuerzo, porque le tenemos que decir a “Europa que nos
importa y que estamos comprometidos con el proyecto” “Nadie
debe quedarse en casa”.
La segunda es votar a partidos minoritarios, que son para el
ministro aquellos que no han ejercido, ni previsiblemente lo
harán, responsabilidades de gobierno a nivel estatal,
detallando que alguien puede pensar “en distraer el voto en
esta elecciones, aunque os quiero decir que no”.
Ruiz Gallardón explicó que la opción política que logre más
apoyos en el Parlamento Europeo “será la que tenga la opción
de marcar las políticas europeas en los próximos años”. Los
dos grandes bloques aspirantes a ello son la izquierda,
representada por el PSOE en España, y el centro derecha,
representado por el Partido Popular. No darle el voto a una
de las grandes formaciones políticas traería como
consecuencia, “en el caso del PP, el riesgo de que en el
cómputo general europeo el Partido Socialista resultase
victorioso e impusiese sus políticas durante los próximos
años”.
La tercera opción, que según el ministro hay que mirar con
respeto, es la de votar al Partido Socialista. Para el
ministro, los socialistas tuvieron una oportunidad
formidable, “ya que cuando accedieron al Gobierno de España
se encontraron un país con unos índices de superávit en
inversión extranjera, con capacidad de exportación
importante y con un superávit de caja que permitía abordar
los proyectos que necesitaba el país para su
transformación”, además de encontrarse con una España
respetada “en Europa y en el mundo”.
Gallardón recordó que España “perdió su peso y su
influencia” y no supo gobernar el país y “antepuso criterios
electoristas a las “necesidades de España”, no haciéndose
respetar en la Unión Europea.
Desde el respeto y tras el análisis crítico realizado, Ruiz
Gallardón razonó que el PSOE “no es un puente adecuado para
entrar ni para estar en Europa y no es un vehículo que se
mueva en la dirección adecuada”, por lo que el mensaje fue
claro y directo.
La cuarta opción barajada por el ministro en su discurso es
la del Partido Popular, “que asumió hace poco más de dos
años la responsabilidad de gobierno en unos tiempos
dificilísimos” y “hoy este país ha dejado de ser un problema
para Europa, para pasar a ser parte de la solución”.
Reconoció los sacrificios realizados por los españoles para
salir de la crisis, a los que siempre “le hemos dicho la
verdad y a los que en cuanto podamos le devolveremos aquello
que les pedimos”. “Hoy tenemos a nuestro alcance conseguir
el objetivo de lanzar un mensaje de seriedad”, reconociendo
el buen hacer del Gobierno de Ceuta “y vuestros problemas
los son de España y, por ende de Europa”, pidiendo el voto
para su formación política, porque “tenemos claro que
creemos en el futuro”.
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