Es como puede entenderla el
Barcelona. Tras haber perdido tres encuentros seguidos que
le han dejado fuera de combate en la Champions, en la Copa
del Rey y casi “groggi” en la liga, no se puede andar más a
rastras.
En definitiva, que en una sola semana han pasado de tener
casi todo en sus manos a no quedarles nada, algo que hacía
varios años no les sucedía, pero como “la risa anda a
barrios” aquello de ganar casi todo lo que se les presentaba
ha quedado ya, para mejor vida, con lo que ahora ya, una vez
más, será, volverá a ser, uno de los grandes, eso siempre,
pero uno, no él solo.
Madrid, precisamente Madrid, ha terminado con la senda
arrolladora del Barcelona, primero el Atlético de Madrid, al
apearlo de la Champions y luego el Real Madrid, su eterno
rival, ganándole, otra vez, una final de la Copa del Rey.
No se puede decir que la temporada para el Barcelona haya
sido un camino de rosas, ni mucho menos, pero es que se ha
metido en tantos charcos que tenía que salir salpicado, por
algún lado, primero con los impagos a Hacienda de Messi,
cosa que se está notando más de la cuenta en el propio
jugador, además de otras cosas. Luego el fichaje “a precio
de ganga” de Neymar, algo que resultó concluyente para que
el que era presidente haya pasado a ser un “ex” de la
poltrona del Barça, y por si fuera poco, con las razones que
sean la “sanción” de la FIFA. Muchos problemas a los que se
han ido uniendo el desgaste, especialmente por cuestión de
edad, de los que parecían los dueños del mundo del balón y
que van quedando en su justo sitio, unos más, buenos pero
unos más.
¿Y ahora?. Lo primero esperar. Luego ya se verá, los grandes
son siempre grandes y tras un resbalón se pueden incorporar,
de inmediato, y volver a la senda de los triunfos, senda que
ahora parece que ha quedado un poco atrás.
La final de la Copa del Rey, no me cabe la menor duda, ha
significado algo más que una simple derrota y muy
especialmente porque el vencedor ha sido el Madrid, con la
particularidad de que, también en este encuentro la gran
figura de los catalanes no se dejó ver. Eso no se esperaba,
especialmente porque en Cataluña se jactaban de ser Messi el
especialista en marcar goles al Madrid.
Lo malo es que aquí no marcó, como tampoco había marcado en
la final de 2011 que, para más INRI, también perdieron los
catalanes, en el mismísimo Mestalla.
Todavía quedan más de cinco semanas de mucho ajetreo,
especialmente para los dos equipos de Madrid. El Barcelona
podría ganar la liga, pero para ello tienen que fallar los
de Chamartín, que han salido reforzados el miércoles, y los
del Calderón, con lo que los blaugranas lo van a tener
complicado, especialmente, cuando son ellos los que vienen
dando más señales de debilidad.
Llegados a esta situación, ya era hora de que los
“omnipotentes” bajaran al mundo de los simplemente humanos,
para volver a ser lo que siempre fueron, con lo que ahora, y
que no se les olvide, en la línea de salida no van a ocupar
la primera plaza, van a estar ahí arriba, pero en segundo o
en tercer lugar, de momento, luego ya veremos donde se van a
ir colocando.
El mes de abril, estoy convencido, lo van a tener grabado a
hierro y a fuego en los ambientes barcelonistas, por cuanto
este mes de abril les ha dejado sin nada de lo mucho que
tenían, bueno, sin nada no, pero para ello tendrán que
fallar los de Madrid.
|