La Delegación del Gobierno en Ceuta ha reconocido que uno de
los asesores que trabajan para Francisco Antonio González
Pérez, se trasladó a la playa de El Tarajal el día en que
murieron 15 personas inmigrantes, pero ha precisado que no
presenció los hechos, sino que llegó más tarde, en torno a
las 9 de la mañana.
Así justifica el organismo que, pese a que uno de sus
empleados estuvo en la zona fronteriza junto a la Guardia
Civil, negara en esas primeras horas la intervención de los
agentes españoles para “repeler” a los subsaharianos y
asegurara que se encargaron las autoridades marroquíes.
“Llegó allí y la Guardia Civil le contó lo ocurrido”. Esta
ha sido la primera contestación de un portavoz de la
delegación del Gobierno a preguntas de ‘eldiario.es’ sobre
la visita de un asesor en El Tarajal. El desplazamiento se
produjo para “ver cómo han ocurrido los hechos, por dónde
han intentado entrar y para ver en qué se puede ayudar”,
continúa el portavoz, que niega que los agentes informaran
al asesor de cómo se había producido la actuación. “Si lo
dijimos es porque nos lo dijeron ellos”, señala el
representante de Delegación en relación al Instituto Armado.
Esa misma fuente señala que es la Guardia Civil la que les
da la información desde el principio, aunque no precisa a
través de qué cauce.
El portavoz de la institución insiste en que dieron la
información de la que disponía a partir de los datos
aportados por la Guardia Civil: “El delegado del Gobierno no
mintió. Su primera comparecencia se produjo cuando tuvimos
la información y se basó en el primer informe de la Guardia
Civil”.
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