Una niña siria de catorce años de edad arribó sola el pasado
domingo a las instalaciones del Centro de Estancia Temporal
de Inmigrantes, en cuyas dependencias ya se encontraba su
madre.
Según ha podido conocer este periódico, todo apunta a que la
niña atravesó la frontera acompañada de alguna otra persona
que con anterioridad podría haber propiciado el pase de la
madre por el paso fronterizo del Tarajal procedente de
Marruecos, ingresando la progenitora en el CETI y realizando
una segunda operación en la que se logró el pase de manera
ilegal por la frontera de la menor, que ha se ha reunido con
su familiar y que ya se encuentra en las dependencias del
centro.
El sábado, otra mujer, también originaria de Siria, apareció
en las instalaciones del CETI de Ceuta, con lo que el flujo
de inmigrantes sirios es incesante en el paso de clandestino
de la frontera y formando una importante comunidad en la
actualidad en el CETI, cuyas instalaciones no estaban
pensadas par acoger a familias completas con hijos como es
el caso de los sirios que arriban a Ceuta.
Pese a ello, en estas dependencias ya se han llevado a cabo
trabajos de acondicionamientos de salas para que las
familias puedan estar juntas y separadas del resto de
residentes del centro.
En la actualidad son algo más de cincuenta los menores de
edad, todos de origen sirio. Unos treinta de ellos son de
corta edad, mientras algo más de la veintena estarían
escolarizados en la actualidad.
Por otro lado, cuatro inmigrantes subsaharianos llegaron
ayer a Ceuta, según las informaciones obtenidas, todo apunta
a que podrían haber sido detenidos cuando viajaban oculto en
un vehículo, aunque fuentes del Centro de Estancia Temporal
de Inmigrantes manifestaron que de momento no habían llegado
a las instalaciones, ya que cuando se produce un hecho como
este, lo primero que se hace es trasladar a los inmigrantes
y al conductor del vehículo hasta dependencias policiales
para el atestado.
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