PORTADA DE HOY
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política - MIÉRCOLES, 2 DE
ABRIL DE 2014 |
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miembros de caballas. reduan. |
caballas
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“La ciudad entera debe
lamentarse junta, no solo los
musulmanes” |
Aróstegui
afirma que González Pérez “no puede seguir un minuto
más en su puesto porque su discurso para hooligans
de extrema derecha demuestra que no entiende esta
ciudad”
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CEUTA
El Pueblo
ceuta@elpueblodeceuta.com |
El grupo de la oposición Coalición Caballas compareció ayer
en rueda de prensa para realizar, en palabras de Mohamed
Alí, “un pronunciamiento concreto y general” sobre la
situación en la barriada de ‘El Príncipe’, indicando que es
preciso “marcar un punto de inflexión y acabar con la
situación de inseguridad”.
Para este partido de la oposición en la Asamblea de la
Ciudad de Ceuta, “se repiten hechos delictivos semana tras
semana ante la pasividad de las autoridades”, señalando que
se asisten a las “bravuconadas del delegado del Gobierno
pero la eficacia es nula en la práctica”. Por ello, Caballas
va a instar al Pleno que se formule un pronunciamiento sobre
la inseguridad ciudadana existente en Ceuta, mediante una
declaración institucional “para que haya un giro y estos
parámetros no se repitan”. Juan Luis Aróstegui llamó “ a
todos los ceutíes a que se sumen a la manifestación prevista
para el próximo día 10 para lograr que los últimos sucesos
marquen un antes y un después y para acabar con esta
intolerable cadena de incidentes”. Aróstegui señaló que “la
obligación de las personas que participan en la vida pública
es hacer pedagogía política, no sólo criticar hechos, sino
tener capacidad de análisis para traducirlos en pautas
sociales”. “La ciudad entera debe lamentarse junta, no solo
los musulmanes o El Príncipe, por lo que sucede en esa
barriada porque dar seguridad y estabilidad a Ceuta pasa por
entendernos y darnos afecto mutuo, no sólo por no
insultarnos”, reflexionó.
El diputado de Caballas dice que “hoy por hoy hay que hacer
una reflexión muy seria, porque no hay toma de conciencia de
que los problemas que se están produciendo son muy graves” y
señala una ruptura entre el pueblo y los políticos, lo que
origina una difícil situación “si existe divorcio entre el
sentir de los ciudadanos y el de los responsables públicos”.
Se refirió a los sentimientos que emanaron en la
manifestación del pasado lunes, donde hubo lágrimas “de
personas de bien”, dijo. Y destacó que “el seguimiento que
tuvo era digno de admirar y tener en cuenta”.
“Me hubiese gustado -dijo Aróstegui- que el delegado hubiese
estado allí, en un acto sencillo, necesario e importante que
el IES Siete Colinas desarrolló con muy buen hacer y en el
que un profesor se preguntó acertadamente cómo puede no
conmmovernos que maten a tiros a un chaval”.
También fue crítico con la Dirección Provincial de
Educación, por no mostrar ningún sentimiento de repula sobre
la muerte de un alumno del Siete Colinas. “Si no nos
conmueve que abatan a tiros a un chaval joven…esta ciudad ha
de reflexionar, porque este es un problema de Ceuta, un
problema muy serio y no solo de El Príncipe”. Aróstegui
recriminó la política de pasividad y del avestruz. “Lo que
ha pasado -dijo Aróstegui- es un límite; de ahí no podemos
pasar”.
Por otra parte señaló al delegado del Gobierno de quien dijo
que “no puede permanecer ni un minuto más en el puesto,
porque el discurso para la extrema derecha está fuera de la
realidad de Ceuta. En vez de un delegado del Gobierno
tenemos una bomba de relojería”, dijo Aróstegui.
Advirtió también el político de la Coalición que “si a la
actual situación no se le da una salida política esto es un
callejón sin salida”. Por ello manifestó que “la ciudad
entera ha de levantarse y decir ‘hasta aquí’ hemos llegado”.
Eso ha de decirse el próximo día 10, Ceuta necesita un
cambio de política y talante. Así no se puede seguir, aunque
hay que pedir, consenso, concordia”.
Preguntados sobre qué significado tiene para ellos el
denominado “cambio radical”, Mohamed Alí tomó la palabra:
“Que hagan lo que vemos en la película cada martes, poner
una Comisaría en ‘El Príncipe Alfonso’ y más medios. Hay que
sentarse a analizar la situación de seguridad de esta
ciudad”.
Juan Luis Aróstegui se refirió a una concentración reciente
a la que asistió en el Centro de Salud de Otero, donde había
veinte policías y un buen número de furgones “para controlar
al personal sanitario que se manifestaba allí y en ‘El
Príncipe’ no hay ninguno”.
Por ello, definió la situación como “una policía que no está
al servicio de los ciudadanos sino de los intereses
políticos del delegado del Gobierno, una policía al servicio
de los cargos públicos”.
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Aróstegui: “Se dan medallas y se aplauden a ellos mismos,
tenemos un Gobierno de Berlanga”
Sobre la distinción que la Policía
local otorgará al delegado del Gobierno, cuando se celebre
el Patrón de la Policía Local, San Urbano, como agente de
Honor del Cuerpo de la Ciudad Autónoma, según ha acordado la
conocida como ‘Comisión de Distinciones de la Policía Local’
a propuesta de su superintendente, Ángel Gómez, Mohamed Alí
dijo ayer que no se ha contado con ellos “pese a esta
honorable distinción”, lo que interpreta que “el partido
Popular trata de preservar los intereses del PP”.
“Que el PP tenga más o menos divisiones internas no tendría
que importarnos si no fuese porque está afectando a la vida
institucional de la Administración, porque la Ciudad
Autónoma tiene un temor atroz al delegado”, subrayó Ali.
Mohamed Alí también añadió que Juan Vivas quiere “evitar a
toda cosa una fractura del PP antes de las elecciones.
González Pérez representa el ala dura, de extrema derecha, y
Vivas quiere paz social hasta las elecciones, algo que está
condicionando la polícia de la institución, que ni se
plantea cuestionar nada para no enfadar al delegado”.
Juan Luis Aróstegui también se refirió a la Medalla
afirmando que “la preocupación de este Gobierno es darse las
medallas entre ellos, ya que antes que González Pérez han
recibido esta distinción el presidente de la Ciudad, Juan
Vivas, y la actual consejera de Gobernación, Yolanda Bel”.
De ahí que en una exclamación indignada, dijera. “Tenemos un
Gobierno de Berlanga en el siglo XXI, que da vergüenza
ajena”, equiparando los comportamientos a las críticas
mordaces de la trama que las películas de Luis García
Berlanga reflejaban sobre la España profunda. “La
preocupación es darse ellos mismos las medallas”, dijo
Aróstegui.
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