El Teatro Auditorio del Revellín acogió ayer a partir de las
19.00 horas la comedia musical ‘Otro gran teatro del mundo’,
una producción de la Compañía Nacional de Teatro Clásico y
Uroc Teatro que está basada en la inmortal obra de Pedro
Calderón de la Barca.
El trabajo forma parte de un proyecto con el que la Compañía
Nacional pretende acercar a los más pequeños algunos de los
grandes clásicos de la literatura española, como El gran
teatro del mundo. El texto de la obra es de Antonio Muñoz de
Mesa, que también uno de los ochos actores que salieron ayer
a escena, y la dirección corre a cargo de Olga Margallo.
En Otro gran teatro del mundo la sonoridad de los versos de
Calderón se transformaron en canciones para presentarle al
público familiar la belleza de este texto desde el teatro
musical, contando para ello con la participación de cuatro
músicos, que se unieron al elenco de ocho actores. Palabra y
música, por tanto, se dieron la mano en un viaje en verso
donde las melodías nos revelaron las rimas de Calderón y
viceversa. Las canciones se convirtieron así en mensajeras
del propio autor para instalarse en el oído del público.
En este texto, Calderón de la Barca (Madrid, 1600 – Madrid,
1681) planteó la vida humana como una gran comedia en la que
cada uno representa el papel que Dios le ha asignado,
vestido con los trajes que el Mundo le proporciona. Pero al
final de nuestra vida solo podremos llevarnos en el equipaje
las cosas buenas que hayamos hecho, sin que importe si hemos
sido poderosos o insignificantes, sino solo buenas personas.
La rebeldía y la pasión de la gente joven, sus preguntas y
sus ganas de cambiar las cosas encontrarán en Otro gran
teatro del mundo inesperadas respuestas a través de una niña
de 7 años que intenta hacerle al Mundo el mejor regalo de
cumpleaños que se pueda imaginar.
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