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Mujer, género del ser humano femenino es la definición según
la RAE. Pero ser mujer es bastante más y en nuestra sociedad
es luchar contra un panorama complicado. Ser mujer hoy, en
España, es luchar más, vivir en desigualdad, sufrir
violencia de género, sentirse inferior por el simple hecho
de nacer mujer y vivir en un mundo “evolucionado” pero
retrógrado. Una mujer hoy “debe” ser la mejor estudiante y
obtener los mejores resultados para poder optar a un puesto
ejecutivo. No con ello cobrará igual que cualquier hombre en
las mismas condiciones. En una sociedad donde la estadística
de desigualdad entre hombres y mujeres se ha tomado como
“normal” o que “siempre es igual” y no se sabe ni se piensa
demasiado cómo lograr reducirlo, podemos decir con total
seguridad de que la sociedad española está y ha fracasado.
A todo ello hay que sumar la privación de derechos, como la
vuelta 30 años atrás con la nueva reforma del aborto, y la
espalda como respuesta del Gobierno, que piensa que a la
mujer hay que decirle como vivir y decidir y además, ha
desestimado acabar con la desigualdad, retirando de su
agenda política la lucha por la igualdad que había llegado a
términos de Ministerio. Vivimos en una sociedad que no tiene
un frente por el que luchar, sino un sin fin de muros que
tirar.
La mujer no puede luchar sola, no debe luchar sola. Todo
hombre, hoy 8 de marzo y el resto de días, debe juntar sus
manos a todas esas mujeres valientes que están cansadas de
ver cómo deben asumir y sufrir más por el hecho de nacer
mujer. Por ello exigimos, como ciudadanos y ciudadanas, que
se luche por la igualdad sin miedo ni vaguedades. Decir en
voz alta que la mujer se merece poder optar a las mismas
oportunidades que cualquier hombre y que desde la política,
como pieza fundamental del cambio, exijamos libertad y
derechos contra las políticas actuales que deprimen y
torpedean la lucha por la igualdad.
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OPINIÓN
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COMUNICADO
