Aunque aquí en Ceuta en vez de ir
una hora detrás del resto de España cosa que se da en
Canarias, en esto de los carnavales vamos con una semana de
retraso.
Esta época que precede a la Semana Santa es curioso que por
parte de un elevado número de jóvenes que han nacido, en el
seno de familias católicas, no son capaces de poner en pie
lo que significa, lo que indica que en una gran parte del
territorio español, especialmente desde que la Religión no
es obligatoria en la enseñanza, va perdiendo, cada vez más
la base cultural y religiosa de lo que ha sido, durante
muchos siglos, el fundamento de nuestra cultura.
Bien es cierto que sí cae bien, incluso a quienes no
nacieron en el seno del catolicismo, el fin de la Cuaresma,
esto es la Semana Santa, pero no por lo que significa en sí,
sino por el colorido o el espectáculo que dan las distintas
cofradías con sus correspondientes procesiones.
Mes y medio de penitencia, un poco menos y, a medida que
transcurran los días, el olor a incienso por las calles de
Ceuta se dejará notar, al igual que se empezarán a oír las
marchas que van a ir acompañando a las distintas
hermandades, cuando les corresponda salir en procesión por
las rutas que tienen que llevar.
Desde ayer, Miércoles de Ceniza, hasta pasados los días
centrales del mes de abril, todavía, queda mucho camino por
recorrer, pero para aquellos que se obligan, a sí mismos, a
estar presentes, con una de las hermandades, los días van a
ir pasando sin sentir.
Una vez llegados a este punto habría que hacerse la pregunta
de si, en estos que se dejan cientos de horas para que su
hermandad destaque, por encima de las otras, es piedad o si
es mero adorno, mera preparación del espectáculo, y sin duda
habrá de todo, pero en el fondo es devoción muy profunda,
aunque poco a poco se vaya colando mucha gente a la que
importa un rábano la devoción y se asome ahí para dejarse
ver, para ocultar otras cosas, a veces inconfesables, o para
poder colaborar con su participación en ambos aspectos, el
festivo sin más y el festivo con lo religiosos.
Y Ceuta que por el cruce de culturas y por el mismísimo
número de habitantes podía estar muy recortada en cuanto al
número de cofradías y asociaciones que estén en primera
fila, todavía cuenta con 14 hermandades de penitencia, que
todas ellas llevan ya mucho tiempo con los preparativos para
que los cultos resulten, cada día mejor.
Orden de salida, horarios, itinerarios ..., un conjunto de
actuaciones que irán dando aspecto y verdadero color, aquí
prefiero no utilizar el término colorido que se queda para
otras fiestas, a la Semana Santa y sus vísperas en Ceuta.
Y desde el martes, a pesar de que todavía era carnaval, la
catedral acoge el Triduo en honor al Señor de Ceuta, Triduo
que se lleva a cabo hasta hoy a las siete de la tarde.
Aquí, y debemos ser sinceros, impera la devoción, lo del
“folklore” puede estar en otras partes y en otros días,
además de que aquí el espectáculo es inexistente, o si hay
espectáculo es tan sólo para los que van a la catedral, por
sí mismos, no se lo muestran a nadie en sus propias calles.
Y uno que nació donde nació y en el seno de una familia
católica, por devoción o porque no había otra cosa que
elegir, no puede olvidar sus raíces y al respetar todo lo
demás lo primero que hace es aconsejar que, al menos los
jóvenes más despegados de todo esto, guarden un respeto por
lo que es y por lo que significa.
|