La tragedia vivida en las costas de nuestra ciudad en la
mañana del 6 de febrero sigue centrando la actualidad. En
esta semana, cosas de la globalización, una actualidad que
se ha escrito la mayoría de las ocasiones fuera de Ceuta: el
PP rechaza pedir una Comisión de Investigación y tumba –con
la abstención del PSOE- la reprobación del ministro de
Interior, Jorge Fernández Díaz. Prácticamente, ya no queda
una sola institución –política, eclesiástica o social- en
España que no se haya pronunciado sobre la tragedia. Incluso
el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, es inquirido
sobre la cuestión en el Senado, repitiendo una frase de
dirigentes socialistas –en el Gobierno entonces-
correspondiente a la tragedia del 29 de septiembre de 2005.
En una especie de carrusel de opiniones a la que no falta ni
Miguel Angel Revilla con una desafortunada comparación entre
los inmigrantes muertos y los delfines, Pérez Rubalcaba
califica de “indefendible” la actuación de la Guardia Civil
en Ceuta.
Mientras, en la Ciudad se escriben dos titulares en relación
con la tragedia. De un lado, se entregan los videos al
Juzgado número 6 y se conocen parte de los informes
realizados por la Guardia Civil, en los que no se informa
del uso de material antidisturbios. Por otra parte el
Ministerio de Interior cuelga en su página web las imágenes
grabadas por el Instituto Armado el día de la tragedia. Y
alrededor de 300 personas se concentran en la Plaza de los
Reyes en repulsa por lo sucedido.
No ha sido lo único. El PSOE pedirá en el Congreso de los
Diputados un informe sobre la situación de personal de
INGESA y pedirá un aumento en la plantilla. Era el motivo de
la rueda de prensa que improvisó el secretario general de
los socialistas, José Antonio Carracao, pero no lo que más
dio que hablar. Unas crípticas palabras en las que deja
entrever que no tiene tomada del todo la decisión de
continuar siendo el cabeza de lista socialista motivan un
reguero de especulaciones sobre el futuro del líder del PSOE
local.
CeutaHelicopters volverá a volar en próximos meses entre
Ceuta y la península (Algeciras y Málaga), después de haber
obtenido todos los permisos necesarios, según anuncia la
compañía catalana. Por otra parte, se conoce también que la
acusación particular pedirá cinco años de prisión contra el
ex vicepresidente del Gobierno y ex presidente del Partido
Popular de Ceuta, Pedro Gordillo, por el “Caso Sineb”.
Mientras, se va notando más la cercanía del carnaval.
Nuestro invitado de esta semana en Ceuta con… es todo un
mito del carnaval gaditano, retirado este año tras más de
cuarenta presentando agrupaciones al concurso del Falla.
Cinco primeros premios en la modalidad de comparsas y un
sinfín de segundos premios y clasificaciones para la final
hacen del de Joaquín Quiñones Madera un palmarés
auténticamente envidiable. El autor de “Hombres azules”,
“Charrúas” o “La Caldera” se reconoce casi sin ilusión por
seguir en el concurso, niega ser trágico en sus letras y
recuerda con cariño sus actuaciones en Ceuta. Precisamente,
los aficionados al carnaval han estado muy pendientes de lo
que ocurría en Onda Cero durante toda la semana, porque la
Viceconsejería de Festejos anunció que se comunicaría en
directo el lugar y la hora de venta de las entradas para el
concurso de esta semana. Algo que aún no ha sido posible.
Sobre la venta de entradas, decir que es el tema de debate
que esta semana hemos planteado en www.ondacero.es/ceuta.
¿Deben venderse como habitualmente, apostaría por el sorteo
o consideran que es mejor usar internet para la venta?.
Hasta pasado mañana están en condiciones de votar.
Y también recordamos la fecha del 23 de febrero. Con un
testigo directo: Francisco Olivencia, que entonces era
diputado de la UCD por Ceuta. El veterano político local
recuerda que vivió tal noche como la de hoy hace 33 años,
con anécdotas como que durmió durante cuatro horas en su
escaño y que le despertó Manuel Fraga Iribarne pegando
gritos a las siete de la mañana exigiendo salir. También la
falta de tabaco, solucionada gracias a unos cartones de
cigarrillos rusos que llegaron desde la Secretaría del
Partido Comunista de España. Olivencia confiesa, también,
tener la convicción de que Suárez visita Ceuta y Melilla dos
meses antes del golpe para pulsar el estado de ánimo de la
guarnición en ambas ciudades. Pero sobre todo, lo mejor de
entrevistas como esa, es contarlas en tono anecdótico y
saber que los enemigos de la Democracia no consiguieron sus
objetivos.
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