La Secretaría de Acción Sindical de UGT ha señalado que,
“tras dos años de reforma laboral, se puede decir con
perspectiva que no ha conseguido los objetivos que
perseguía, ya que ha aumentado el desempleo, ha empeorado la
calidad del que queda, ha aumentado la precariedad y la
temporalidad y ha debilitado la negociación colectiva”.
En este sentido, desde UGT se ha manifestado que los
objetivos de esta reforma eran “reducir la destrucción de
empleo y contribuir a la creación del mismo, reducir la
segmentación y dualidad del mercado laboral, potenciar la
flexibilidad interna de las empresas para ganar
competitividad y contribuir a la recuperación de la
economía, pero se ha demostrado que el objetivo real que
perseguía era la devaluación salarial y el aumento de las
desigualdades y la pobreza”.
La central sindical ha presentado el informe “Dos años de
reforma laboral: evolución del empleo, la contratación, los
despidos y la negociación colectiva”, donde se recogen
algunos datos como la reducción del número de ocupados en
más de un millón de personas entre el último trimestre de
2011 y el último de 2013 y 622.700 desempleados más, un
aumento del 11,8%.
En este periodo “ha aumentado la precariedad en el empleo,
con un incremento del tiempo parcial en 280.000 puestos de
trabajo y 6 de cada 10 empleos indefinidos perdidos. La tasa
de paro ha pasado del 21,6% al 26,4%, el número de parados
de larga duración ha aumentado un 6,1% y el subempleo se ha
incrementado en 164.000 personas, hasta un total de
2.401.300”.
Precisamente, el secretario general de UGT, Antonio Gil, a
este respecto manifestaba recientemente a unas declaraciones
realizadas a la Cadena Ser, recogidas por este diario, que
“la reforma laboral no ha incentivado para nada la actividad
económica en la ciudad, sino que por el contrario la ha
abaratado”. A este respecto el ugetista manifestaba que
desde su punto de vista siempre ha destacado que “la miseria
trae miseria y con estas medidas de recortes, la actividad
económica desaparece”. Gil destacó que uno de los grandes
males de la ciudad “es que la demanda interna no tira, y con
este modelo y con estas medidas, tirará menos todavía”.
El ugetista recordaba que lo primero que ha hecho el
Gobierno ha sido “eliminar la negociación colectiva así como
la cláusula de ultraactividad que es la garantía, de los
convenios colectivos y de los trabajadores, de que se
avanza, y con esta eliminación de la ultraactividad de los
covenios lo que se provoca es que se empiece desde cero y
por consiguiente es una manera de dar ventaja a los
empresarios, quienes se aseguran el sometimiento de los
trabajadores y quitarle un derecho que ha costado mucho
trabajo conseguir y que en este momento está cogido con
pinzas”. Por este motivo, Gil reconocía que la reforma
laboral llevada a cabo por el Gobierno ha sido “muy
agresiva” y por consiguiente auguró un futuro nada
halagüeño, al resaltar que revertir toda esta situación será
un trabajo muy costoso aunque resaltó que “por fin algunas
voces importantes de Europa han comenzado a reconocer los
efectos perniciosos de esta reforma y esperemos que nuestro
Gobierno, dirigido siempre por la falta de propuesta e
imaginación, facilite las cosas y evite un mayor daño”.
Finalmente, lamentaba que el modelo económico de la ciudad
sea muy débil, indicando que el sector primario en Ceuta “no
supone ni medio punto del Producto Interior Bruto de la
ciudad, sabíamos que ese modelo que está sustentando en el
sector servicio fundamentalmente ya que actividad
empresarial prácticamente existe poca y debería tener mucho
más protagonismo”.
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El contrato de emprendedores ha disminuído
El contrato estrella de la
reforma, el de emprendedores, “ha disminuido su utilización
en un 4% y su peso total en la contratación es prácticamente
marginal, un 0,6%. El 86% de los contratos no se han acogido
a las ayudas fiscales que da el Gobierno, por lo que el 86%
de los contratos han terminado su vigencia al cumplir el año
de prueba.
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