Aunque a algunos de ustedes les
cueste trabajo entenderlo, todos aquellos personajillos que
vienen de la Península a nuestra tierra a hacer algunas
gestiones, vienen con el convencimiento pleno de que todos
los ceutíes somos unos pardillos.
Lo primero que hacen es traerse un Rolex y un maletín de la
marca Cartier, además de un buen traje que dé el pego como
si fuese de Aramani, con su correspondiente corbata, que la
corbata no puede faltar, Todos esos atuendos, tanto el Rolex,
maletín y traje son más falsos que una moneda de trece
euros. Pues de todo es sabido que en esta tierra, lo del
Rolex, el maletín Cartier y el traje, se pueden comprar por
muy poco dinero no muy lejos de nuestra ciudad.
De esa guisa se presentan en el lugar que corresponda hacer
su gestión, procurando hablar “finolis”, y de vez en cuando,
más en cuando que en vez, hacen como los que miran la hora,
para que el que los recibe vea la clase de reloj que llevan
en su muñeca.
No se dan cuenta estos pardillos, personajillos del tres al
cuarto, que en esta bendita tierra, el más tonto de los que
en lla habitamos, sabemos hacer plasmas de 42” en color y
con los últimos adelantos de la técnica japonesa. Dicho esto
cambiamos de temas y nos vamos a lo último de la Cámara de
Comercio.
El pasado lunes, en la sede de UGT se reunieron los cuatro
ex trabajadores de la Cámara que, por cierto, aún no han
recibido un euro de los que legalmente les corresponde, con
un asesor económico de la Cámara, para llegar a un acuerdo
sobre el pago de lo que la Cámara les debe a estos ex
trabajadores.
La propuesta consistía en que a los ex trabajadores ya no se
les descontaría el 50% de las costas judiciales y del
descuento del 28% de lo que se le adeuda, se reducía a que
perdonaran el 18% de la misma
Como es lógico, los ex trabajadores no aceptaron esta
oferta, pues quieren lo que en justicia se les debe, y que
la Cámara en sede judicial había dado su conformidad al pago
de esa deuda aunque, a la fecha de hoy, ha incumplido el
acuerdo aceptado en la sede judicial.
Uno piensa, perdón por pensar, que cuando se va a negociar
con alguien, al que se le debe dinero, lo menos que puede
hace el negociador es llevar con él, dinero o una chequera,
para hacer efectivo el pago si aceptan sus condiciones. Pues
no señor, ni llevaba dinero en efectivo ni chequera, y
además pedía que le dieran unos días para reunir esa
cantidad y, al parecer, también solicitaba que retiraran la
demanda de embargo que pesa sobre la Cámara.
Ni que decir tiene que los ex trabajadores y el abogado de
UGT, no aceptaron nada de la oferte, dándole un plazo hasta
hoy viernes, para que efectuar el pago de lo que legalmente
les corresponde a los ex trabajadores.
¿Qué credibilidad puede tener la Cámara de Comercio, ante
estos ex trabajadores, si lleva meses incumpliendo lo
pactado en la sede judicial?.
Según ellos no tiene credibilidad ninguna, y no aceptarán
más que el pago de las cantidades que se les adeudan. Les
cuento lo que ocurra este viernes, en el próximo artículo.
|