El próximo día 21 de febrero se cumplen cinco años desde que
la Iglesia de San Francisco quedara cerrada a la feligresía
debido a los graves desperfectos estructurales que
presentaba. Desde ese instante se han ejecutado en el templo
un total de dos fases y a día de hoy, y después de que las
obras en el interior del templo finalizaran el pasado mes de
noviembre de 2013, se desconoce a que está esperando el
Obispado de Cádiz y Ceuta para concluir los pequeños
destalles que quedan en el interior, donde si se quisiera,
tal y como ha podido comprobar este diario, ya podría
oficiarse misa y dejar de una vez la parte trasera de la
Iglesia donde los numerosos feligreses muchas veces tienen
que escuchar misa desde la calle debido a la falta de
espacio.
El Obispado de Cádiz y Ceuta es el que, desde que fuera
designado el nuevo vicario, se hizo cargo de todo lo
concerniente a la obra de recuperación de la Iglesia de San
Francisco, de ahí que ni los padres agustinos, ni el
arquitecto y ni la Vicaría General de Ceuta se quieran
pronunciar al respecto, y destaquen que es el Obispado y más
concretamente el ecónomo, Antonio Diufaín Mora, quien puede
arrojar algo de luz a este asunto.
La última información con la que se cuenta es que parece que
el Obispado de Cádiz y Ceuta quiere alargar un poco más la
reapertura del templo y tiene proyectada una tercera fase la
cual ya ha sido adjudicada a una empresa foránea.
Esta tercera fase contemplaría una serie de actuaciones en
el exterior del templo debido a unas filtraciones que se han
detectado, así como los unos últimos retoques en el
interior.
Tal y como ya informó EL PUEBLO, esta tercera fase ha sido
preparada por el equipo técnico que posee el Obispado de
Cádiz, el cual se hizo cargo de todo lo concerniente a la
obra y lo está tramitando todo, quitándole poder de decisión
a la Vicaría General de Ceuta.
Echando la visa atrás, durante estos cinco años la obras de
mayor calado se efectuaron durante la primera fase, en la
que se contemplaba la colocación de unos micropilotes para
asegurar la cimentación y consolidar todos los arcos y la
estructura de la Iglesia. En esa misma primera fase también
estaba la sustitución completa de la cubierta.
Una vez concluida esta primera fase, en la segunda se
acometieron todos las obras contempladas en el interior del
templo, siendo la más importante el derribo y posterior
contrucción del coro de la iglesia, para finalmente proceder
a la colocación de la solería, el revestimiento del
interior, la carpintería, la pintura y la luminaria, cuyos
trabajos están totalmente finalizados.
Por último, hay que destacar que los propios feligreses de
San Francisco se han estado movilizando durante todo este
tiempo para lograr recaudar fondos que fueran destinado a
paliar el importante desembolso económico que ha supuesto
esta obra y con la esperanza de que la apertura del templo
se hiciera a la mayor brevedad posible, pero estas
esperanzas se están desvaneciendo gracias a que esta deseada
apertura se va postergando en el tiempo sin que, según
indican, “haya motivos para ello, máxime cuando las obras en
el interior estén finalizadas”.
|