PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
  

 

 

OPINIÓN - DOMINGO, 26 DE ENERO DE 2014

 

OPINIÓN / EL OASIS

Ni habla ni oye
 


Manolo De la Torre
manolodelatorre@elpueblodeceuta.com
 

Sé muy bien que opinar de las funciones que desempeña una mujer hace ya mucho tiempo que es acción comprometedora y hasta peligrosa para cualquier varón que se atreva. Tanto si el parecer es para premiarla con ditirambos como si se le achacan errores de bulto. Hace ya mucho tiempo que decirle a una mujer que ha metido la pata hasta el corvejón, en cualquier tarea que desempeñe, puede ser motivo suficiente para recibir muestras de desagrado y hasta bronca acompañada de los más prestigiados dicterios.

Pero uno, que adora a las mujeres, y detesta el machismo en la misma medida que a las feministas que se sitúan en el nivel masculino y usan sus mismas despreciadas armas, nunca ha tenido el menor reparo, cuando la ocasión lo ha requerido, de plantarles cara.

Sí, lleva usted razón, me consta que Yolanda Bel ha pasado por este espacio en varias ocasiones, y hasta puede que haya dicho antes lo mismo de ella… Y que me cae tan bien como para que deseche usted cuanto antes que la tengo tomada con la consejera. Pero estoy seguro de que nunca repito lo que escribo con las mismas palabras. Y es así, no sólo por respeto a mis lectores, sino porque YB, además de haber venido interpretando hasta ahora, perfectamente además, el papel de Belinda -mejor incluso que la adorable Jane Wyman, en su día-, ahora estamos descubriendo que si hacerse la muda es para ella cosa de coser y cantar, más fácil le resulta hacerse la sorda con tal de no querer oír lo que viene aconteciendo a su alrededor.

La consejera de Presidencia, Gobernación y Empleo, portavoz actual por enfermedad de un compañero, amén de presidenta de su partido, ha dado en la manía de hablar poco, poco es nada, y de poner la cara de mujer que desconoce cualquier problema de los que se vienen suscitando en organismos que están bajo su dominio.

Delante de mí, sobre la mesa donde trabajo, tengo abierto este periódico, con fecha de sábado, por la página donde se tacha de ridícula la actuación de YB, como portavoz, tras el Consejo de Gobierno. Y ninguna falta hace tenerle fobia a la consejera, que no es mi caso, para decirle que lleva ya mucho tiempo, muchísimo, pegando un petardo de mucha consideración. Que es lo último que a quien escribe le hubiera gustado decir en voz alta.

Mire usted, consejera de tantas cosas y todas importantes, a mí me parece justo que como imputada, todavía, se aferre usted a no decir ni pío de un asunto tan desagradable, porque esa es la consigna que le habrá dado quien decide todos los comportamientos de los miembros del Gobierno al que usted pertenece como actriz principal. Por tal motivo, nuestro alcalde decidió acompañarla a la cita judicial, tal vez pensando que su sola presencia en los juzgados era más que suficiente para evitarle a usted un posible paseíllo infernal. Como si él no supiera que el PP tiene tan abundante clientelismo en la tierra como para que semejante hecho no se produzca jamás. Si bien sabe usted, aunque deba repetirme, que mi parecer es que “los políticos honrados se quitan de en medio cuando cae sobre ellos la sospecha”.

Ahora bien, lo que no entenderé nunca es que también le hayan dicho que haga usted oídos sordos a lo ocurrido en RTVC y en cómo han sido liquidados los gerentes de las sociedades municipales. Y, ante orden tan categórica, a usted no le haya quedado más remedio que seguir haciéndose la sueca. Por cierto, más quisieran muchas de ellas lucir su palmito. A mandar, señora…
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto