Los sindicatos expusieron a sus delegados y trabajadores en
la Asamblea celebrada en el salón de actos sindical, que a
partir de ahora, se inicia una nueva etapa en relación a sus
actuaciones en la manera de funcionamiento de las sociedades
municipales. Quieren eludir riesgos en forma de
sobredimensión de estas entidades y plantean fiscalizar las
cuentas, algo que por derecho les corresponde, así como el
acceso de altos cargos y de trabajadores, para eludir el
riesgo de estabilidad laboral para “los que ya están”. Y a
este respecto, las palabras de Emilio Postigo (CC.OO) fueron
muy explícitas: “Que no sean lo que han sido y que no se
engorden como hasta ahora”.
Justificaron la conversión de sociedades municipales en
organismo autónomo para salvaguardar los puesto de trabajo y
culparon directamente, a la secretaria general y al
interventor, como garantes de la legalidad, de los fallos
registrados en el procedimiento administrativos, ya que,
-dijeron-, “el aspecto en la cuestión laboral era perfecto
pero los fallos burocráticos son los que han impedido que se
culminara este proceso”.
“Se nos ha dicho que hay riesgo para los puestos de trabajo
si no se echaba marcha atrás, ya que en dos o tres años, si
las sentencian fueran adversas el riesgo existía y los
trabajadores se quedaban en el limbo al no existir ya las
sociedades municipales”.
Tambien indicaron los representantes de CC.OO y UGT que
desde que suscribieron el acuerdo con el Gobierno de la
Ciudad Autónoma de Ceuta el 6 de agosto, “hubo
modificaciones en la ley y ya no se cerraba el proceso el 31
de diciembre, sino que se podían fundir en la empresa matriz
Obimace y Parque Marítimo del Mediterráneo, que eran las que
corrían peligro, hasta el 30 de abril, aunque el Gobierno
local no ha dicho que el próximo mes, ya estará resuelto
este asunto; no sabemos si se van a fusionar en la empresa
matriz o serán independientes”.
En cuanto a los objetivos empresariales, a partir de ahora,
se verá empresa por empresa, para conocer los fallos y hacer
que sean sostenibles. La segunda vía a plantear es “hacer
una reestructuración de empresas para que se puedan
sostener”. Indicaron que Ceuta es una ciudad singular y
“tenemos un poco de suerte en este sentido”, ya que
expusieron que, de Algeciras hacia arriba, no hubiera
sucedido igual y habría mucha genete en la calle.
También señalaron la necesidad de un convenio único, aunque
no lo consideraron prioritario en estos momentos, por
movilidad, promoción interna y sostenibilidad.
CC.OO y UGT indicaron que hoy “se deshace lo hecho y se
vuelve a la situación anterior, sin problema para el cobro
de las nóminas”. UGT dijo que el Gobierno de Juan Vivas
tiene voluntad política de solucionar esta situación y que
“la vuelta atrás significa estabilidad en los puestos de
trabajo”.
Otro asunto a destacar es el planteamiento de que “sería
importante crear órganos de control y que los Comités de
Empresa no pueden estar ajenos al acceso de altos cargos o
trabajadores a las empresas ni los gastos que éstas tengan.
“Tenemos que participar porque el perjuicio que se ocasione
es para todos”, dijeron.
Se planteará un calendario de reuniones con el Gobierno de
la Ciudad, aunque los primero es estar tranquilos, “ya que
hablamos de familias y de puestos de trabajo”. Los
presentantes sindicales dejaron claro que serán exhaustivos
en el control de las empresas: “Si vemos despilfarro, lo
denunciaremos. Y si no nos dan la cuenta de resultados,
iremos al Juzgado y si hay una promoción injustificada y se
contrata a alguien por la cara, la denunciaremos”, indicaron
ante la Asamblea. “Aquí podemos trabajar en el presente y
aguantar el futuro”, dijeron.
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