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El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente
ya ha sacado a consulta pública el Esquema Provisional de
Temas Importantes (ETI) de la revisión del proceso de
planificación de todas las demarcaciones hidrográficas del
país. Aunque en Ceuta se aprobó en octubre el primer ciclo
de planificación, en este segundo que abarca el periodo
2015-2021 se introducen novedades importantes como es el
apartado de ‘Avenidas e Inundaciones’ en el que se
recomienda a la Ciudad invertir algo más de 5 millones de
euros entre 2016 y 2021 para adecuar los arroyos de la
ciudad y mitigar las consecuencias de las avenidas.
En el ETI se ha incorporado este nuevo “dado el riesgo en la
demarcación de Ceuta de sufrir inundaciones en diversas
zonas”. Según refleja la Confederación Hidrográfica del
Guadalquivir (CHG) en este informe, en Ceuta se ha
incrementado el riesgo de exposición a las avenidas debido
al desarrollo urbano experimentado en las últimas décadas.
Así, en el documento explican que los usos de la cuenca, que
hasta hace escasamente veinte años eran netamente de
carácter rural, hoy en día están destinados a usos urbanos:
barrios y polígonos industriales, con deficientes
infraestructuras de drenaje ante episodios de intensas
lluvias.
Zonas de riesgo
La CHG ya ha identificado las áreas de riesgo potencial
significativo de inundación y las sitúa en el arroyo de
Benítez, la Cañada Ortega y el Barranco Central, el arroyo
de Las Bombas, el arroyo de Las Colmenas, Benzú, la Murallas
Reales, y la Almadraba. Estos son los puntos negros dentro
de los Planes de Gestión de Riesgo de Inundación que también
se están elaborando para coordinarlo con el Plan Hidrológico
de la demarcación.
Los objetivos que se pretenden alcanzar es asegurar la
“reversibilidad” de la alteración del estado ecológico de
las masas de agua en el caso de inundaciones y proteger
tanto la salud como las vidas humanas, la actividad
económica y el patrimonio cultural.
En el documento, la CHG recoge como históricamente se han
repetido inundaciones en la zonas definidas como de riesgo y
como esto ha provocado “el empeoramiento del estado de las
aguas”. No obstante, como consecuencia de la incorporación
de la “Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundaciones” por
parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en
la Planificación Hidrológica de la demarcación, se prevé una
importante mejora en el conocimiento y estudio de estos
episodios.
En los últimos años se han realizado labores para la
reparación de daños causados en cauces en arroyos como el de
las Bombas o el de Benítez. Sin embargo, debido a la
coyuntura económica actual, se han pospuesto diversas
medidas como la adecuación de los demás arroyos de la ciudad
y otras actuaciones del Plan Especial de Inundaciones, y así
lo recoge el documento.
Por último, en este apartado la CHG propone dos alternativas
de actuación. La primera de ellas, calificada como la más
idónea, prevé una inversión algo superior a los 5 millones
de euros para la adecuación de los arroyos de la ciudad que
debería ser ejecutada en el periodo 2016-2021. Según la CHG,
esta inversión repercutiría positivamente en la población y
mitigaría las consecuencias de las avenidas.
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Ceuta tiene una demanda de 23.500 m3/día
El caudal demandado en Ceuta es de
unos 23.500 m3/día. Los depósitos de cabecera de la red de
suministro urbano se alimentan de la desalinizadora, con una
producción de 20.000 m3/día de agua y que prevé alcanzar los
30.000 m3/día, y la Estación de Tratamiento de Agua Potable
con una capacidad de 35.000 m3/día.
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El consumo, sujeto a la desalinizadoraImagen
El 80% del agua suministrada para
el consumo urbano proviene de la planta desalinizadora, por
lo que el origen de una posible sequía radicaría en una
incidencia en la planta. Por ello, uno de los principales
problemas recae en la necesidad de Plan de emergencias
frente a situaciones de sequía que deberá ser elaborado por
la Ciudad
Autónoma.
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Ligera reducción de cuatro litros por habitante
Se pretende invertir la tendencia
de la demanda de los últimos años, estimándose una ligera
reducción de 4 litros por habitante y día en 2015. En cuanto
la oferta de recursos, se prevé un aumento de agua potable
de 10.000 m³
gracias a los nuevos módulos de la planta desalinizadora,
por lo que disminuirá la incidencia de la sequía
meteorológica sobre la garantía de suministro.
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Campañas para el control del gasto de agua
Algunas de las medidas que plantea
la CHG para garantizar el consumo son la racionalización del
uso del agua, campañas para el control del consumo; el
incremento de la eficiencia de suministro; nuevas
actuaciones para la mejora en el abastecimiento, saneamiento
y la depuración; o la ampliación de redes de agua
reutilización de la EDAR.
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precaucion
