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Las campañas solidarias de reparto
de alimentos para familias vulnerables son una constante en
tiempos navideños y especialmente en los últimos años cuando
la crisis económica ha arreciado. Por ello, se hace
extensiva a todo el año con un reparto importante de
toneladas para atender a los 7.000 necesitados de Ceuta, que
se reparten el Banco de Alimentos con sus asociaciones y la
Cruz Roja. Un importante contingente de familias en estado
de necesidad que reciben estas ayudas para su subsistencia
en unos momentos en los que la necesidad extrema ha
experimentado un repunte importante.
Las crisis económica ha hecho aflorar una nueva modalidad de
necesitados: los nuevos pobres, consecuencia del desempleo,
que se han visto arrastrados al impago de la hipoteca y a la
precariedad de no tener para comer. Y aún cuando aquí, en
Ceuta, no existen comedores sociales como en algunos lugares
de la península, lo cierto es que Banco de Alimentos y Cruz
Roja, abastecen de productos imperecederos para la atención
de 3.470 familias a través de sus asociaciones y 928 hogares
por parte de la entidad humanitaria, en unos momentos en los
que han aumentado en los dos últimos años los demandantes de
ayuda de 1.200 a 3.470 en el Banco de Aloimentos.
La solidaridad de los ceutíes se ha dejado notar hasta el
punto que, cuanto mayor ha sido la necesidad, igualmente ha
ido en aumento la generosidad ciudadana. Las distintas
campañas han contado con una buena respuesta desde todos los
frentes, incluidos los supermercados que también han
contribuido en las aportaciones. De ahí que este sentimiento
compartido sea el mejor síntoma solidario para nuestros
semejantes.
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OPINIÓN / EDITORIAL
