La puntualidad volvió a brillar ayer por su ausencia en el
Teatro del Revellín. El musical ‘Pulgarcita’, cuya primera
sesión estaba prevista para las 18.00 horas, se hizo de
rogar. Las decenas de niños que abarrotaban ayer el teatro
tuvieron que esperar casi un cuarto de hora para comenzar a
conocer la historia de una bella muchacha nacida de una
flor. Así, cuando se apagaron las luces se escuchó el
primero de los aplausos.
La versión libre de Gloria Muñoz, inspirada en el cuento
original de Hans Christian Andersen, dejó embelesados a los
pequeños asistentes a esta obra de teatro traída a la ciudad
aprovechando las vacaciones navideñas de los niños. En las
dos sesiones previstas para el día de ayer, (18.00 y 20.00
horas), los ceutíes descubrieron “el amor imposiblemente
pequeño” de Pulgarcita y el príncipe Cornelius, impedido por
un feo y torpe sapo que se enamora de la protagonista de
esta obra y la rapta para casarse con ella. Así comienza la
historia de esta pequeña muchacha en el mundo de las cosas
grandes.
Durante el transcurso de la obra, los personajes saltaron al
patio de butacas para involucrar a los niños y no perder en
ningún momento su atención. No en balde, los pequeños son el
público más exigente y ayer dieron el sobresaliente a esta
obra que interpretaron Ester Carpes como Pulgarcita, Raúl
Martín como Cornelius, José María Niebla como mamá sapo,
Edgar Moreno como hijo sapo, Gloria Garcia como hada Naida,
Fran Pousa como duende Elfie, y Hugo Ruiz como Jaquimó.
Pulgarcita, dirigida por Alfredo Ávila, es un montaje que
recrea al rapto de Pulgarcita y el posterior “intento de
boda” con el sapo, eliminando al resto de candidatos de la
historia original de Hans Christian Andersen y ambientándolo
en un bosque de hadas y duendes. Es una obra distinta,
especial, repleta de sorpresas, y, al contrario que otros
montajes musicales, no persigue tanto la participación, como
contar una historia y emocionar al público, según la
productora.
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