|
La presidenta de la asociación de vecinos de la barriada de
la Estación del Ferrocarril, Sonia Cubero, ha explicado las
deficiencias que se encuentran en la zona los vecinos a
diario. En primer lugar, Cubero se refirió a una cañería de
aguas sucias en una parte del jardín. “Llevamos mucho tiempo
diciendo que se ponga una tubería para evitar que el agua
llegue al barrio”, señaló. La representante vecinal también
explicó que se arreglaron las losetas hace poco tiempo y “se
han dejado dos o tres levantadas” y que han provocado la
caída de varios vecinos.
Una reivindicación ‘histórica’ de la asociación de vecinos
es que se retiren las vallas de obra que rodean a la antigua
estación de ferrocarril, ya que las actuaciones están
paralizadas y lo único que causan estas vallas son
problemas. “No nos hacen ni caso y hemos pedido en
muchísimas ocasiones que se coloque el acerado si la obra no
se va a hacer, pero al parecer el paseo de la Marina es más
importante”, ironizó la presidenta del ente vecinal.
Por otro lado, Cubero relató la solicitud realizada a la
Ciudad para que se “individualicen los portones”. Es decir,
que se habiliten accesos en cada una de las puertas de los
edificios porque “los vecinos que viven en los del centro no
pueden entrar”.
La seguridad, “buena”
“Tampoco nos han hecho caso”, lamentó. La representante de
la asociación de vecinos también destacó que la señalización
horizontal “tan sólo se ha pintado la parte que se ve, la
zona principal, pero por lo demás nada”. “No se han colocado
las señales, algunas están mal puestas y no hay pasos de
peatones y algún día se va a producir algún atropello”,
destacó. “Se piensan que para arreglarnos las barandillas y
poner dos losetas rotas, el barrio ya está listo”, lamentó.
“Tampoco nos han pitado los bajos de los portones; tantas
promesas... Estoy esperando a los políticos cuando lleguen
las elecciones”, destacó. “Es un barrio joven, pero en otras
barriadas se gastan muchos y muchos millones y nosotros lo
que pedimos no vale tanto; son minucias y cosas que
servirían para tener el barrio muy bien, ¿qué cuesta poner
unos escalones o unas paredes?”, preguntó.
Por otra parte, Cubero habló acerca del arreglo de la calle,
junto a los garajes: “Se gastaron el dinero en arreglarlo y
ahora tenemos la calle a dos niveles, no sé qué trabajo
cuesta echar la parte que falta de hormigón”. “No estamos
pidiendo nada del otro mundo, son minucias, pero nos están
perjudicando”, comentó.
Por último, la presidenta vecinal habló de seguridad, la
cual calificó de “buena”, además de la limpieza, que
“también está bien”.
|
barriadas
