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Buenos días, Ceuta. Tras un fin de
semana visitando pueblos de Andalucía llega el momento de
tomar la pluma, digo el teclado, y encomendarme a la tarea
de fastidiar por escrito. En este país, el de la marca
España en decadencia, la movida política se parece más a una
serie de gamberradas, políticas precisamente, que dejan la
impronta de un país bananero. Empezamos con las variaciones
declaratorias de los peperos en materia de economía y
presentadas con una cara dura envidiablemente directa. Hay
que ser muy tonto para no comprender que las declaraciones
de los políticos entran de lleno en el saco de declaraciones
desviadoras y ocultación de la verdad.
Se ve, desde lejos, la mano de los lobbies por encima de
cualquier otra manipulación. Las declaraciones de los
principales políticos del PP, sobre contabilidades de otros,
conforman más un chiste imbécil y malísimo que otra cosa.
Por un lado, los peperos tratan al ciudadano como a un
pelele y por otro demuestran que son incapaces de gobernar
un país abocado a la incordia.
En otro orden de cosas, ya resulta un poco inquietante que
surja militares con ganas de armar conflictos. Me refiero a
ese militar que, en San Sebastián, de gritos de ¡Viva
Franco! mostrando a la vez sus genitales. Menuda deshonra
para nuestro Ejército. Ignoro si lo hizo como burla al
dictador, sabido es que tenía un solo huevo, según la
leyenda popular porque en realidad nadie, excepto la del
collar permanente, habrá visto la llamada parte noble, pero
guarra, del que fue figura grabada en nuestras antiguas
pesetas.
Recordarán Vds. un artículo mío en el que escribía sobre las
mastodónticas construcciones, en diversos sitios del país,
que vaciaron las arcas gubernamentales en buena medida ¿Si?,
pues ahora vemos que tuve razón en todo cuanto escribí. El
aeropuerto de Ciudad Real en venta, con una pérdida de 990
millones de euros, es un claro ejemplo de la nefasta
política constructiva de quienes siguen teniendo retazos
dictatoriales y faraónicos.
Mucha movida de demandas en los juzgados por parte de
personajes populares (del PP) que acaban archivadas o
rechazadas, casos Cospedal y Sánchez-Camacho antes de que el
nuevo Poder Judicial asuma el mando. Algo es algo dentro del
caos justiciero.
Lo de Sánchez-Camacho parece un guión de sainete. Es genial
que la pepera catalana haya montado este melodrama de espías
y ahora lo tape ‘perdonando’… en realidad lo hace para
evitar que salgan a la luz más cosas de lo que ella
pretendía. A cambio de ese ‘perdón’ se ha embolsado 80.000
euros… con esta tarifa me atrevería en grabar dos o tres
conversaciones privadas y pagaría la hipoteca dándome, de
paso, un garbeo por donde yo me sé.
Lo de la secretaria general del PP, Cospedal, ya es rizar el
rizo. Aunque salga en su apoyo el Mariano proclamando, como
ella, que los papeles B son simples ‘notas’ de quién los
tiene ¿no te jode? ‘Lo’ de Cristóbal Montoro ya es un
‘quítame allá esas pajas’ y fomenta un desprestigio
monumental, no ya de Hacienda sino del propio país.
Aunque a decir verdad, el desprestigio lo fomenta desde que
asumió el cargo y se puso a joder a los ciudadanos… alguien
que tiene en la cabeza joder siempre a los mismos y perdonar
deudas millonarias a los ricos no resulta ser más que un
buen falderillo de éstos.
Ignoro si se entretiene, en sus ratos libres, dando
martillazos a una pieza cuadrada intentando meterla en un
tubo redondo. Es necesario que acuda a una buena escuela y
aprenda las palabras limpia, brilla y dar esplendor en vez
de ensuciar, deslucir y dar betún. Lo de las destituciones…,
mejor lo dejamos porque declarar que la cúpula de Hacienda
está llena de socialistas demuestra el ‘modus operandi’ del
PP para salvar la cara.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
