Era una mañana soleada entre
puentes y escaqueos y Ceuta amanecía lista para formar donde
tiene su morada las dos Unidades de Infantería con mas
Solera, Heroísmo , Nobleza y Honor del Ejercito Español.
-Con las embestidas que da los avatares de la vida, casi
calcadas de aquella mañana que se produjo el Milagro de
Empel ya me apresuraba a ponerme en algún acotado de los que
me corresponda en el Gonzalez Tablas.
-Luce majestuoso y señorial el Acuartelamiento con un sol de
justicia que me había dejado el ultimo Viernes Regular y que
parecía decir, Javier aqui lo tienes otra vez que para eso
eres depositario de tantas glorias y hazañas de esta tierra
africana.
-Y el Acto se me torció de la forma más amarga...
-Como los invitados eran numerosos y las hermandades y
asistentes nos moviamos de un lado a otro, mira por donde
que me tuviera que volver a meter en las guerras de los
Tercios de Flandes allá por el 1585...
-A mi izquierda dos parejas, y un señor Capitán de
Infantería y se le presupone por sus condecoraciones en su
pecho el servicio y lealtad a España, y vaya si me dió por
pensar si yo tenía que soportar aquella afrenta en un lugar
tan bello y acogedor como es mi Casa de mis Fieles
Regulares.
-Los acompañantes con el , vestidos más bien de bajarse a
tomar una copa al Poblado y una lengua que ya para si la
quisieran algunos de los que me encuentro cada mañana de
paso por cualquier barrio o callejón de cada esquina en
petit comité, no eran ni por asomo decorosos para un evento
de tal celebración, donde se imagina uno que todos vamos a
disfrutar con una pasión y fé inaguantables.
-Y llegaron el carrusel de frases por parte del Capitán,
explicando a los amigos y amigas tales cosas del Acto, que
las “tiras” que lleva el palo de la Bandera de Regulares,
son “premios” ganados por el Cuartel...
-Madre mía, ya empezaba yo a sudar más de lo normal y me
dieron ganas de decirle, mira esas tiras son Laureadas
ganadas con el heroismo y la sangre de muchos Españoles e
Indígenas que lucharon y hasta el ultimo aliento de sus
vidas , la Patria engrandecieron.
-Así fueron pasando los improperíos y desfachatez de los
amigos , y la poca ética profesional de un Oficial del
Ejército, que si bien me da la intuición, ya no estás en
activo porque en tu otra profesión veías un futuro mejor y
vienes a lucirte al acto y tus amigos por lo menos que
tuvieran la curiosidad por preguntar y el respeto por la
formación.
-Lo de la rubia... que si formaban gallinas... era el
colmo... Si la llega a escuchar un padre o una madre... le
estamparian la cara, con eso de ¡ mi hijo forma ahi y no es
ninguna gallina! .
-Sólo recordar cuando cruzaste la acera para ver la
formación, ni saludaste a la Bandera, y si tus medallas “ la
tralla” eran de Afganistan o Kosovo, las tuyas no valen un
duro. Y las que despreciaste en tu verborrea, las que luce
mi Bandera, es la que decimos, ¡ como valientes lucharon y
como héroes murieron ! .
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